El secretario de Inmigración de la Generalitat catalana, Oriol Amorós, ha afirmado que los consistorios sólo pueden ceder datos del padrón al Estado a petición del mismo, después de que el Ayuntamiento de Vic (Barcelona) decidiese notificar los casos de inmigrantes en situación irregular al Gobierno central.

En declaraciones a TV3, Amorós ha explicado que el traspaso de datos sobre el padrón está contemplado por diversas leyes la de Régimen de Bases Locales, Extranjería y de Protección de Datos, y que en todos los casos lo solicita el Estado. Por ello, ha instado al Ayuntamiento de Vic “que se asesore jurídicamente” por si estuviese vulnerando la ley de Protección de Datos.

Sin embargo, ha admitido que la inmigración irregular es uno de los problemas “más complicados de resolver”, y ha apostado por reducirlo con una buena política de fronteras, la colaboración con los países de origen y luchando contra la economía sumergida.

Con los inmigrantes ‘sin papeles’ que ya están en Cataluña, “a veces toca hacer expulsiones y otra regularizaciones”, ha dicho Amorós, en línea con la advertencia de la Comisión Europea al Estado español.

Asimismo, ha apuntado que sería “inteligente” dejar marchar a los inmigrantes que quieran hacerlo, “no sea que se estén quedando por motivos jurídicos y no económicos”, ha remachado en referencia a la reforma del reglamento de Extranjería.