El Cuerpo Nacional de Policía ha desarticulado, con la detención de doce personas, la mayor organización dedicada al tráfico ilegal de seres humanos, una red integrada por marroquíes y argelinos que podría haber introducido en Melilla a más de 200 inmigrantes . Durante ocho meses, y a instancias del Juzgado de Instrucción número 4, la Brigada de Extranjería y Frontera ha recabado las pruebas necesarias y ha evitado que quienes estaban siendo investigados pudieran darse a la fuga. El delegado del Gobierno felicitó ayer a la Jefatura Superior por este nuevo éxito y anunció que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no bajarán la guardia en su lucha contra este tipo de bandas.

Gregorio Escobar confirmó que la organización se dedicaba a captar a sus víctimas en ciudades argelinas para, a cambio de una importante cantidad de dinero, facilitarles documentación falsa y guiarles hasta la frontera. El objetivo era hacer llegar a estos inmigrantes hasta el CETI con el fin de que, por razones humanitarias, consiguieran una regularización.

El pasado martes se dio por concluida la fase de explotación de una operación que arrancó a finales del pasado mes de junio. Para obtener las pruebas se han ordenado varios registros domiciliarios a lo largo de la investigación, dos de ellos en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes . El delegado del Gobierno no descartó que la documentación incautada permita iniciar nuevas actuaciones.

La Ley española establece penas de hasta ocho años por delitos contra el derecho de los extranjeros y de hasta seis por falsedad documental. Escobar cree que, en este caso, existe un agravante por asociación ilícita dado que la banda estaba muy jerarquizada. Las víctimas eran trasladadas desde sus ciudades de origen, en Argelia, hasta la provincia de Nador, donde la red les facilitaba una documentación falsa para que pudieran pasar a Melilla aprovechando las aglomeraciones del puesto de Beni – Enzar. El delegado estima que el 85 por ciento de los argelinos que el año pasado entraron en la ciudad lo hicieron con la ayuda de esta organización. La Policía está convencida de que tres de los últimos cuatro detenidos eran los cabecillas de la banda.