ENRIQUE FIGUEREDO – Barcelona

ROBO TRÁGICO Se impone la teoría de que los asesinos querían reventar la máquina tragaperras

VIOLENCIA SIN LÍMITE El cadáver de Josep tenía heridas de arma blanca, además de martillazos
La investigación de los Mossos d´Esquadra sobre el doble asesinato del bar Joan en la calle Provenza junto a la Diagonal avanza en la dirección de aislar las huellas descubiertas en la escena del crimen. A pesar de que en un establecimiento público se acumulan miles de huellas, existen algunas – las localizadas, por ejemplo, en un arma homicida-que si no son los de las víctimas son de los autores del crimen. Los investigadores buscan a los posibles autores del crimen entre criminales extranjeros que todavía pueden no tener en España antecedentes de estas características, pero sí en sus países de origen, por lo que los mecanismos de colaboración internacional – Europol e Interpol-podrían estar a punto de ponerse en marcha. Otra vía de rastreo consiste en revisar el listado de presidiarios recientemente excarcelados, que podrían encajar en el perfil de ladrón de comercios muy violento.

Y es que cada vez con más intensidad – pese a todavía no descartar hipótesis alguna-,los Mossos d´Esquadra creen que el móvil del crimen fue el de un robo en el bar que acabó de la manera más trágica. Los ladrones habrían sido dos o incluso más, según informaciones cercanas al caso. Todo parece indicar que cuando los asaltantes irrumpieron en el bar pensaron que no había nadie en su interior. Puede que incluso la persiana estuviera bajada por completo y, al intentar abrirla con las potentes herramientas que llevaban, se dieron cuenta que no estaba atrancada.

Siguiendo esa posible reconstrucción de los hechos, los ladrones habrían empezado incluso la operación para la que habían entrado: reventar la máquina tragaperras.

Fuentes del caso confirman que los autores del crimen no se llevaron todo el dinero que había en el bar, sólo el de la tragaperras y despreciaron el que había en caja registradoras. Al aparecer en escena Maria C., de 85 años, o su hijo Josep F., de 55, los ladrones se revolvieron. Utilizaron para atracarles algunas de las citadas herramientas.

Un especialista en investigación judicial explicó ayer que la inmensa mayoría de los ladrones que se ven sorprendidos huyen, pero que existe “un cinco por ciento que reacciona violentamente”. Este podría ser el caso que ocupa a los investigadores criminales de los Mossos.

Dentro de esta teoría de los ladrones sorprendidos, encaja el hecho de que hayan aparecido posibles huellas de los asesinos, puesto que no iban preparados para cometer una muerte sino para robar una tragaperras y, por tanto, no tomaron precauciones que un asesino a sueldo, por ejemplo, sí habría tomado. Existe un elemento que no acaba de encajar en este relato y es el hecho de Josep F., prácticamente ciego, además de los golpes en la cabeza, presentara heridas de arma blanca en el tórax. No sólo recibió golpes de martillo u otra herramienta penetrante –como demuestran las perforaciones craneales que presenta su madre– sino que fue apuñalado. Ni una ni otra víctima, una mujer con movilidad reducida y uno hombre con el 10% de la visión. pudieron presentar prácticamente resistencia. ¿Por qué entonces tanta brutalidad? La respuesta la darán los perfiles de los autores cuando sean detenidosoplenamente identificados. La elección del bar Joan no debió de ser al azar. Es posible que alguno de los criminales hubiera estado en el establecimiento días antes, por esa razón son muy importantes las declaraciones de posibles clientes o de la empleada del bar. Por ello y porque de alguna manera los ladrones tuvieron que llegar a la escena del crimen es por lo que los Mossos están analizando todas las grabaciones de videovigilancia de la zona, incluidas las de las estaciones cercanas de metro.
Vicent Gasca, presidente de la asociación de comerciantes de Sant Antoni, dice que desde primero de año sufren un oleada de robos sin precedentes en el barrio. “Los bares y muchos otros tipos de negocio… pero siempre siguiendo los mismos métodos, como en el Bingo, donde ya robaron hace un mes y trataron de repetir la madrugada del lunes. Creemos que son un grupo organizado que nos amargará la vida hasta que se cansen o los detengan”. Sus sospechas no andan desencaminadas.

Los Mossos informaron ayer de que 17 de los 18 rumanos detenidos la semana pasada en Badalona por asaltar bares están ya en prisión provisional. La decisión judicial es un alivio para los investigadores. Fuentes policiales denuncian las dificultades que hallan para ver entre rejas a estos criminales. Necesitan demostrar su multirreincidencia o acusarles también de otros delitos, como asociación ilícita u otros relacionados con la violencia hacia las personas. Los arrestados en Badalona robaron en más de sesenta bares en seis meses, todos en sólo dos barrios, los más cercanos a sus pisos. Y en alguna ocasión, cuando se encontraron con el propietario, no dudaron en emplear la violencia.

Y es que estos sospechosos acumulan más de 200 antecedentes, dato que, junto al desasosiego ciudadano generado, ha llevado al juzgado de instrucción número dos de Badalona, informó Europa Press, a tomar una medida pionera en España y dictar una orden de expulsión y alejamiento de la urbe para los detenidos hasta que el proceso judicial acabe y haya una sentencia de una instancia superior.

La policía autonómica también explicó esta semana la desarticulación de otro grupo especializado, esta vez formado por cinco españoles, sospechosos de robar en más de sesenta establecimientos comerciales de Lloret, Tossa, Blanes, Vidreres, Santa Coloma de Farners, Gavà, Badalona, Santa Coloma de Gramenet, Sant Boi, Mollet, Montcada, Castellarnau, Cerdanyola y, sobre todo, el barcelonés barrio de Horta. Su predilección eran los za, presentara heridas de arma blanca en el tórax. No sólo recibió golpes de martillo u otra herramienta penetrante – como demuestran las perforaciones craneales que presenta su madre-sino que fue apuñalado. Ni una ni otra víctima, una mujer con movilidad reducida y uno hombre con el 10% de la visión. pudieron presentar prácticamente resistencia. ¿Por qué entonces tanta brutalidad? La respuesta la darán los perfiles de los autores cuando sean detenidos o plenamente identificados.

La elección del bar Joan no debió de ser al azar. Es posible que alguno de los criminales hubiera estado en el establecimiento días antes, por esa razón son muy importantes las declaraciones de posibles clientes o de la empleada del bar.

Por ello y porque de alguna manera los ladrones tuvieron que llegar a la escena del crimen es por lo que los Mossos están analizando todas las grabaciones de videovigilancia de la zona, incluidas las de las estaciones cercanas de metro. bares. Antes de que se conocieran las detenciones, los comerciantes del lugar pensaron en atestar sus balcones con pancartas de protesta.

Ante los acontecimientos, las fuerzas de seguridad y las propias asociaciones de comerciantes intensifican sus consejos en pro de la seguridad. Muchos hosteleros están cambiando sus costumbres. “Esta gente es cada vez más osada – dice Eduardo Guillén desde su casa de comidas entre Diputació y Bailèn-.Te vigilan. Ya hace tiempo que me reventaron la persiana. Y el otro día los sorprendí echando mano de la caja, aprovechando un despiste. Ya no la dejo sola”. En cualquier momento, en cualquier lugar. En la pizzería de al lado dicen que a ellos también les forzaron la entrada. El local está en la misma manzana que el Departament d´Interior.