EEUU pide a Cuba liberar a estadounidense en mesa de diálogo sobre migración

Prensa Libre, 20-02-2010

LA HABANA (AFP) –
Altos funcionarios de Estados Unidos pidieron el viernes en La Habana la “liberación inmediata” del estadounidense arrestado en Cuba bajo acusación de espionaje, en la segunda ronda de diálogo sobre migración entre dos países que no tienen relaciones diplomáticas.


La misión estadounidense, encabezada por Craig Kelly, asistente del secretario de Estado adjunto para América Latina, “por separado abordó el caso” de Alan Gross, detenido el 4 de diciembre, y pidió “su liberación inmediata”, dijo un comunicado difundido por la Sección de Intereses de Washington en La Habana (SINA).


Washington identifica a Gross, de 60 años, como un contratista de la compañía Development Alternatives (DAI) que trataba de ayudar a grupos de judíos para comunicarse con el exterior dándoles celulares y ordenadores. Em cambio, Cuba lo acusa de dotar de “sofisticados” medios de comunicación a los opositores “mercenarios” de Estados Unidos.


El gobierno de Raúl Castro, que estuvo representado en la plática por el vicecanciller Dagoberto Rodríguez, no mencionó el caso en el comunicado que emitió por separado al final del encuentro, el cual – destacó – “se desarrolló en un ambiente respetuoso”.


“Ambas delegaciones evaluaron el comportamiento de los acuerdos migratorios vigentes entre los dos países. También discutieron aspectos contenidos en el nuevo proyecto de acuerdo migratorio, presentado por Cuba” en julio de 2009 en Nueva York, subrayó la nota cubana, sin precisar detalles de la propuesta.


La plática en Nueva York fue la reanundación del diálogo en temas de migración, interrumpido en 2003 en el anterior gobierno de George W. Bush, y retomado luego de que llegó al poder Barack Obama, quien liberó los viajes de cubanoestadounidenses y el envío de remesas a Cuba e inició negociaciones para reanudar el correo directo, cancelado en 1963.


Ambos gobiernos resaltaron la importancia del diálogo migratorio.


“La reunión reafirmó la importancia y utilidad de este mecanismo” de consulta, dijo – según el comunicado – Rodríguez, que pidió además la ampliación del personal cubano en su Sesión de Intereses en Washington.


De su lado, los funcionarios de Estados Unidos destacaron el interés de su gobierno de que Cuba garantice a la SINA “operar total y efectivamente”, “comprobar el bienestar de los emigrantes repatriados” y que “el gobierno de Cuba acepte la repatriación de los nacionales cubanos que son excluibles por motivos penales”.


Sin relación diplomática desde 1961 tras el triunfo de la revolución de Fidel Castro en 1959, Estados Unidos y Cuba firmaron en 1994 un primer pacto migratorio, en la “crisis de los balseros”, cuando unos 37.000 se lanzaron al mar en precarias embarcaciones.


Estados Unidos se comprometió a dar 20.000 visas anuales y devolver (política de “pies secos – pies mojados”) a los ilegales interceptados por los guardacostas, a quienes Cuba prometió recibir sin represalias. En cambio, los que alcanzan territorio estadounidense son aceptados.


Desde entonces emigraron de esa forma unos 300.000 cubanos hacia Estados Unidos, pero el drama no terminó pues muchos siguen lanzándose al mar. Otros viajan ruta Ecuador – que no les pide visa – o México – a través de traficantes – .


El tema migratorio es un viejo conflicto entre ambos países. Cuba acusa a Estados Unidos de estimular el éxodo con la Ley de Ajuste (1966) que da a los cubanos residencia automática. Mientras, Estados Unidos responsabiliza a Cuba por la situación económica y falta de libertades.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)