Que Éric Javier Velasteguí Jara, alias King Wolverine, “el padrino” de los Latin Kings (LK) en España, controle aún los hilos de la agrupación, como anunció recientemente la Policía española, pese a permanecer recluido en un centro penitenciario en la Península, no debería sorprender a nadie. La cárcel continúa siendo el espacio natural de las bandas latinas y la consigna en la “Nación” no admite discusión: “una vez rey, rey para siempre”.

Tres años después de ser apresado por un delito de violación en mayo del 2006, la Policía sabía que el inmigrante ecuatoriano dictaba órdenes que los “hermanitos”, como se denominan los integrantes de los LK, cumplían a rajatabla. El desmantelamiento de la cúpula de esta banda latina en Madrid, el pasado domingo, no ha hecho más que confirmar que nadie ha conseguido quitarle el trono al guayaquileño.

Después del verano, Velasteguí delegó a otro ecuatoriano, recién salido de prisión, la reorganización en la calle de la Sagrada Tribu América Spain (sección española de Almighty Latin Kings & Queens Nation).

Fue a finales del 2009, cuando los especialistas en bandas latinas de la Jefatura Superior de Policía detectaron diversas reuniones a las que acudieron personas vinculadas a hechos delictivos. Las primeras ocho detenciones por un presunto delito de robo con violencia protagonizado por miembros de los LK se produjeron el 6 de enero (Día de Reyes, fecha simbólica para los ‘latin’). Horas antes, los agentes habían sorprendido a los integrantes de la agrupación en el parque Olof Palme (se identificó a 87 jóvenes), el mismo sitio que acostumbraba frecuentar Velasteguí para impartir doctrina.

Un mes más tarde, el 14 de febrero, en la celebración del décimo aniversario de fundación del grupo en España, los uniformados practicaron 43 detenciones (sus edades oscilan entre los 18 y 29 años). Los policías irrumpieron a primera hora de la tarde en la fiesta organizada por los nuevos líderes (cayeron el “inca supremo”, los “incas” de seis “capítulos” –células básicas que operan en cada barrio–, cinco de Madrid capital y uno de la localidad de Leganés).

A los asistentes no les dio tiempo a comerse la torta adornada con 10 velas pero sí a ensalzar al amo entre rejas (en el local se colocaron dos retratos de King Wolverine) y a recordar a los “hermanitos” fallecidos.

Solo cinco individuos fueron puestos a disposición judicial por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y desde ayer duermen entre barrotes, según informó el Tribunal Superior de Justicia. Miguel Ángel C.C., Álex Salvador O.P., Danny Fernando T.M., Rommel Fabricio G.S. y William Voltaire están acusados de los delitos de asociación ilícita, amenazas graves, coacciones graves y lesiones. Las pesquisas continúan.

Pese al operativo, la Policía no ha dado por desmantelada la organización en Madrid, ya que la estructura se regenera con gran rapidez.

Apuntes: La macro operación
80 agentes
En la macro operación del domingo pasado intervinieron 80 agentes, la mayoría antidisturbios.

Simbología
Ese día,  se intervino  gran cantidad de simbología utilizada por los Latin Kings, como collares con los que se determina su condición de reyes y de las posiciones en la cadena de mando, cuentas para elaborarlos, banderas amarillas y negras, pañuelos y anillos; numerosa documentación relativa a la organización de la banda y nueve teléfonos móviles que dejaron abandonados.