El primer ministro francés, François Fillon, firmará personalmente el decreto que niega por primera vez la nacionalidad a un hombre que obliga a su esposa a usar el velo integral islámico. El anuncio llega una semana después de que una comisión parlamentaria recomendara la prohibición del uso del burka en los servicios públicos y en la recta final del debate sobre la identidad nacional.

El hombre a quien se niega la naturalización está casado con una francesa. El ministro de Inmigración, Eric Besson, ha precisado que durante la preceptiva entrevista para tramitar su demanda «negó muy claramente los principios de igualdad hombre – mujer, reivindicó su desvinculación y rechazo del laicismo y reconoció que impone a su esposa el uso del velo integral».

El primer ministro lo ha secundado recalcando que el rechazo de su petición está prevista en el Código Penal al no conformarse el demandante a los principios de la República. «Se trata de un religioso radical que impone el burka a su esposa, impone la separación de hombres y mujeres en su propia casa y se niega a estrechar la mano a las mujeres», y para François Fillon «si ese señor no quiere cambiar de actitud, no tiene aquí su lugar, no merece la nacionalidad francesa».

No es la primera vez, sin embargo, que el velo integral sirve de motivo para denegar una naturalización. Ya le ocurrió en el 2008 a una joven marroquí. El Consejo de Estado dictaminó entonces que al usar el burka, la chica había adoptado «en nombre de una práctica radical de su religión un comportamiento social incompatible con los valores esenciales de la comunidad francesa y especialmente la igualdad entre los sexos».

El Partido Socialista, contrario tanto al uso del burka como a una ley que lo prohíba, está de acuerdo con la decisión del Gobierno, aunque la denuncia como «electoralista».

Desde la extrema derecha, Marinne Le Pen sostiene que «si este hombre obliga a su esposa a llevar el burka está cometiendo un delito» y lo que tiene que hacer Besson es llevarlo a los tribunales para que lo condenen.

El Gobierno estudia añadir claramente en la ley el uso del velo integral como motivo de rechazo de la naturalización, al mismo tiempo que su prohibición para el acceso a los servicios públicos. El Ejecutivo dará por concluido el lunes el debate sobre la identidad nacional.

En medio de la polémica, la extrema izquierda anunció ayer que presenta como candidata a las elecciones regionales a una joven con velo que se define como feminista y anticapitalista.