El Ayuntamiento de Vic prefirió no valorar la respuesta de la Abogacía del Estado y fuentes de la alcaldía señalaron que esperarán a conocer el texto de respuesta para entrar a valorarlo.

El lunes, el consistorio de Vic registró una instancia en la subdelegación del Gobierno en Barcelona dirigida al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, a través de la cual le reclamaba que informase por escrito sobre los requisitos de los pasaportes que presentan los inmigrantes para poder inscribirlos.

Por su parte, el PSC bajó el tono de hace dos días, cuando la dirección ordenó a sus concejales en ese municipio que rechazasen la normativa del alcalde.

Así, el portavoz adjunto del PSC en el Parlamento catalán, David Pérez, afirmó que el partido no tomará por ahora medidas disciplinarias contra sus cuatro ediles, que por otra parte continúan apoyando la propuesta del gobierno municipal, lo que les ha enfrentado con la ejecutiva socialista.

Los ediles socialistas se mostraron en todo momento dispuestos a abandonar su iniciativa si una instancia superior determina que es ilegal.

El PP pide reformar la norma

Por su parte el PP aclaró que nunca abogará por la insumisión y, por tanto, no “abanderará el incumplimiento de una ley (Extranjería) por muy en desacuerdo que estén con la norma”, explicó Dolores de Cospedal. Pero al tiempo defendió la necesidad de su reforma, “porque no está bien hecha”, y anticipó que será uno de los ejes de su campaña en Cataluña.

Soraya Sáenz de Santamaría recuperó una de las banderas electorales del PP, el contrato de integración de los inmigrantes, una idea basada en las tesis de Nicolás Sarkozy que reclama que la única fórmula de legalización de extranjeros, además de un contrato de trabajo o un permiso de residencia, requiera de un compromiso explícito de aceptación de los valores constitucionales y del régimen de libertades español. La fórmula decayó tras la derrota electoral de 2004 y de nuevo fue rechazada el otoño pasado en el Congreso, en el debate de la ley de Extranjería.

Encuesta municipal

Por otro lado, un sondeo encargado por el Ayuntamiento de Vic y divulgado ayer revela que la inmigración no está entre las principales preocupaciones de sus vecinos, ya que éste ocupa el noveno lugar por detrás del paro, la falta de aparcamientos o la carencia de zonas verdes. Según el barómetro municipal de Vic 2009, sólo el 4,6% de los habitantes citaron la inmigración como el principal problema, frente a un 13,9% que señaló el paro o el 12,1% la falta de aparcamiento.