Dos argelinos, con mantas de Cruz Roja y vigilados por guardias civiles, en Cartagena. :: J. M. RODRÍGUEZ / AGM

Año nuevo, drama viejo. Doce inmigrantes argelinos inauguraron ayer la penosa lista de pateras llegadas a la Región de Murcia en 2010, porque nada hace indicar que vaya a ser la última. Hacia las cuatro de la tarde, personal del Servicio de Vigilancia Aduanera avistó desde un avión la embarcación en la que los extranjeros trataban de alcanzar su sueño dorado: la costa de Cartagena, España, Europa.

La eficaz intervención de las fuerzas estatales de socorro en el mar abortó los planes de los inmigrantes y permitió rescatarlos cuando navegaban a unas 30 millas al sureste de Cabo de Palos.

Según la información facilitada por un portavoz de Sasemar, un equipo enviado a la zona recogió en una patrullera a toda la tripulación.

Los inmigrantes, que iban a bordo de una embarcación rígida de unos 4,5 metros de eslora y con un motor de quince caballos de potencia, fueron trasladados de inmediato al Puerto de Cartagena.

Allí estaba desplegado ya el operativo especial para estas situaciones, donde participan el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, voluntarios de Cruz Roja y agentes de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cartagena.

Oleada en diciembre

Según la información facilitada por la Delegación del Gobierno, todos los ‘espaldas mojadas’, uno de los sobrenombres que reciben los inmigrantes que se juegan la vida en una patera en busca de la prosperidad, estaban bien de salud.

Quince voluntarios de Cruz Roja les prestaron asistencia humanitaria en el Muelle de Santa Lucía. Luego, pasaron a disposición de la Policía para la identificación y el inicio de los trámites de devolución a su país de origen por vulnerar la Ley de Extranjería.

El menor de edad, que según las fuentes consultadas tiene unos dieciséis años, fue puesto a disposición del Servicio del Menor de la Comunidad Autónoma.

Antes de la de ayer, la última embarcación con argelinos había sido interceptada frente a las costas de Cartagena el domingo 13 de diciembre. En pleno temporal de frío, viento y lluvia, otra docena de inmigrantes se aventuraron en una patera pero un buque mercante francés les vio y dio aviso a Sasemar.

Desde mar, aire y tierra

Los ocupantes de la embarcación fueron los últimos argelinos interceptados en una oleada de pateras que en sólo cuatro días llevó a rescatar y detener a 62 inmigrantes. Las principales vías de detección de pateras son los avisos desde mercantes y la localización en el mar a través de Sasemar o el Servicio Marítimo de la Guardia Civil; desde el aire por el Servicio de Vigilancia Aduanera; y desde tierra por los radares instalados en el litoral por la Guardia Civil (en el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior).

En 2009, la Región de Murcia recibió un 13% más de inmigrantes en pateras: 732, frente a los 639 del año anterior, según los datos hechos públicos hace unos días por el Ministerio del Interior.