DV. Solidaridad, igualdad y, sobre todo, tolerancia cero frente a la violencia machista. Instituciones públicas, partidos políticos y entidades sociales alzaron ayer su voz para arropar a las mujeres maltratadas con mensajes de apoyo en los que abundan los llamamientos a la igualdad y la codena a cualquier tipo de violencia contra las mujeres. También insistieron en la importancia de la implicación social para erradicar esta lacra que en sus expresiones más cruentas sega vidas o impone la condena de vivir con escolta, situación que sufren 17 mujeres en el País Vasco.

La directora de Atención a las Víctimas de Violencia de Género y la responsable de Emakunde, Mariola Serrano y María Silvestre, expresaron en un comunicado conjunto su «más profundo rechazo y condena» a la violencia que se ejerce contra las mujeres por el mero hecho de serlo, a la vez que destacaron lo fundamental que resulta para las mujeres maltratadas «que sientan la solidaridad y el apoyo de nuestra sociedad», por lo que invitaron a toda la ciudadanía a que manifieste su tolerancia cero frente a estas agresiones en los actos convocados con motivo del Día Internacional contra la Violencia contra las Mujeres. En la capital guipuzcoana, los sindicatos ELA, LAB, ESK, Stee – Eilas, EHNE e HIRU han convocado una concentración para hoy a las 12.00 horas en el Boulevard. Del mismo sitio, pero a las 19.30 horas, partirá una manifestación a la que se ha adherido el consistorio donostiarra.

Serrano y Silvestre también consideraron que «las leyes son necesarias, aunque no suficientes» y consideraron que esta lacra tiene solución a largo plazo mediante la sensibilización, prevención, y la educación en valores no sexistas de las nuevas generaciones.

Mujeres extranjeras

La oenegé SOS Racismo recordó que las mujeres extranjeras están «dramáticamente sobreexpuestas respecto a las autóctonas» a sufrir malos tratos o morir asesinadas a manos de sus parejas o ex parejas, por lo que instó a las instituciones a «tomar medidas» al respecto. SOS Racismo Gipuzkoa trasladó en concreto su preocupación ante la «vulnerabilidad de las mujeres extranjeras en situación irregular», que son «víctima de violencia machista, ya que éstas están sometidas a una doble violencia, la ejercida por el maltratador y la discriminación a la que se ve abocada en la legislación, que prima su condición de inmigrante sobre la de víctima».

En este sentido, la Comisión de Ayuda al Refugiado aseguró que la inminente reforma prevista de la Ley de Extranjería «desincentivará» las denuncias por violencia de género, ya que contempla que las autoridades incoen expediente de expulsión a las extranjeras en situación irregular que acudan a dependencias policiales, aunque luego ese expediente no se ejecute hasta que no haya sentencia condenatoria por malos tratos.

Save the Children y la Fundación Instituto de Reinserción Social – IReS recordaron que en España 800.000 niños conviven en hogares con violencia de género y que sólo el 4% de estos menores recibe atención especializada. «Independientemente de que los niños y niñas hayan estado presentes o no en escenas de violencia explícita, la tensión que se vive en estos hogares les afecta directamente y tiene consecuencias a corto, medio y largo plazo».

Los partidos políticos también se sumaron a la lucha contra el maltrato a las mujeres.

El PNV expresó su compromiso político de tomar las medidas necesarias para «erradicar la violencia machista» que supone una «violación de los derechos humanos y de las libertades fundamentales». La formación jeltzale recordó que la violencia contra las mujeres «trasciende todos los sectores de la sociedad», independientemente de «su clase, raza o grupo étnico, nivel de ingresos, cultura, nivel educacional, edad o religión».

EA instó al conjunto de la sociedad a participar «de forma activa» en los actos y concentraciones convocados . «La única vía para acabar con la violencia sexista es la defensa y la aplicación de la premisa de tolerancia cero en todos los ámbitos de nuestra sociedad».

Aralar manifestó su compromiso con la lucha por conseguir la igualdad plena entre hombre y mujer, «única herramienta válida» que puede producir la erradicación definitiva de la violencia machista.