Barcelona

Una operación conjunta realizada por la Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra ha permitido asestar un duro golpe a una mafia que se dedicaba a la falsificación de pasaportes y documentación de personas inmigrantes.

Sus integrantes pedían grandes sumas de dinero a inmigrantes extracomunitarios para hacerlos pasar por ciudadanos de la Unión Europea falsificando tarjetas de residencia, especialmente a brasileños que querían hacerse pasar por portugueses para poder residir y trabajar legalmente en países de la Unión Europea, según explicaron ayer fuentes policiales.

Durante la madrugada y la mañana de ayer se sucedieron una decena de registros en varios domicilios y locales de las provincias de Barcelona y Tarragona. Los agentes entraron en pisos de Mollet del VallÈs, Badalona, Santa Coloma de Gramenet, Vilanova i la Geltrú, Segur de Calafell y Cunit. Fue una intervención muy discreta salvo en algún caso, como en Segur de Calafell, donde los efectivos tuvieron que tirar abajo una puerta. Se da la circunstancia, además, de que los registros en Santa Coloma de Gramenet y Badalona llegan unas semanas más tarde de los que ya tuvieron lugar en estas ciudades en el marco de la operación Pretoria II. En el caso de Santa Coloma, los Mossos d’Esquadra arrestaron a, por lo menos, dos personas en las calles Irlanda y Vista Alegre, según pudo comprobar Efe.

En total hubo varios detenidos – su número no fue precisado por ninguno de los dos cuerpos policiales implicados al haber secreto de sumario – , a los que inicialmente se acusa de falsificación de documentos, aunque también podrían acabar siendo imputados por otros delitos relacionados con este tipo de organizaciones, como favorecimiento de la inmigración ilegal y asociación ilícita. Las mismas fuentes policiales afirmaron que anoche la operación seguía abierta y que no se descartaban nuevos arrestos.

La investigación, dirigida por un juzgado de El Vendrell (Tarragona) comenzó hace medio año. Los registros realizados han permitido a los investigadores incautarse de gran cantidad de documentos y aparatos electrónicos, como ordenadores e impresoras, con los que presuntamente llevaban a cabo las falsificaciones.

Una operación parecida a ésta tuvo lugar en julio de 2007, cuando la Policía Nacional detuvo a 44 personas, todas ellas de origen brasileño, en Girona, Salt, Barcelona y, también, Santa Coloma de Gramenet, por falsificar y vender también documentos de identidad portuguesa a compatriotas suyos para facilitar su residencia legal en nuestro país.