Trece inmigrante de origen argelino llegaron ayer en una patera a motor de cuatro metros de eslora que desembarcó en la playa del Hornillo. Un pescador dio el aviso de llegada cuando vio aparecer al bote en el varadero de la playa, alrededor de las 19 horas. Los tripulantes huyeron, se cambiaron de ropa y pidieron ayuda en francés, según algunos testigos. No había mujeres ni niños a bordo y los supervivientes presentaban buen aspecto de salud, salvo uno, que fue trasladado al centro de salud Águilas Norte tras perder un poco de visión en uno de sus ojos.

Según el edil Pedro Peña, no se descarta que un barco nodriza les dejara cerca de la costa, como ya ocurrió hace dos semanas en la anterior patera que arribó a la costa aguileña. En esta ocasión, es la primera vez que desembarca en el casco urbano del municipio.