Exteriores justifica la retención de Aminatu Haidar, que anoche inició una huelga de hambre y fue desalojada del aeropuerto de Lanzarote Madrid

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, justificó ayer haber permitido la entrada en España de la activista saharaui, Aminatu Haidar, sólo con la tarjeta de residencia y sin pasaporte, lo que, a juicio de la conocida defensora de los Derechos Humanos, supone una vulneración de la Ley de Extranjería.

«La señora Aminatu Haidar entró en España con su tarjeta de residencia que es un documento que no vale, sin embargo, para viajar fuera de España. Para salir de España necesita un pasaporte o un documento de viaje del que, por el momento, carece al haber declarado que su pasaporte marroquí le fue retirado», afirmó el Ministerio de Exteriores en un comunicado.

El ministro respaldó además que el Gobierno marroquí no permitiese la entrada de Haidar en El Aaiún: «Si por razones administrativas, no ha rellenado los requisitos que el Gobierno marroquí le pide, lo que ha hecho el Gobierno de España es facilitar su llegada a Lanzarote», explicó el ministro en Córdoba.

La llamada Gandhi saharaui fue desalojada anoche del aeropuerto de Lanzarote por efectivos de la Guardia Civil, según informó RNE. Uno de sus colaboradores aseguró a EL MUNDO.es que varios efectivos del Instituto Armado la trasladaron por la fuerza, en una camilla, fuera del recinto aeroportuario; y que en el forcejeo le produjeron un golpe en una cadera; informa Ana Bravo.

El desalojo se produjo poco después de que, a medianoche, Haidar iniciara una huelga de hambre para protestar por lo que califica como una retención irregular de las autoridades españolas.

Aunque ella se considera saharaui, posee la nacionalidad marroquí y como todos los ciudadanos de este país necesita un pasaporte y un visado para entrar en España. La activista tiene tarjeta de residencia en nuestro país, lo que le exime de presentar visado, pero nunca del pasaporte, que es un requisito obligatorio.

Fuentes policiales consultadas por este diario criticaron las contradicciones del comunicado de Exteriores, puesto que los requisitos de entrada y de salida son los mismos y, por tanto, las autoridades nunca debieron permitir su entrada. «Es completamente irregular que le hayan dejado entrar sin el pasaporte y ahora, no la dejen volver a su país porque dicen que no lo tiene», declararon las mismas fuentes.

Haidar, que acababa de recibir en Nueva York el Premio Coraje Civil, ha presentado una denuncia ante la Policía Nacional en Lanzarote, en la que relata que presionaron al piloto de la compañía que no quería dejarla volar desde El Aaiún a Lanzarote porque carecía de la documentación necesaria.

La peripecia comenzó el pasado viernes cuando aterrizó en El Aaiún, la capital del Sáhara occidental. Según la versión de Marruecos, Aminatu Haidar se negó a cumplir «con las formalidades ordinarias». Ella alega que, cuando rellenaba la ficha policial, en el apartado de nacionalidad puso «saharaui», como había hecho en otras ocasiones.

La Gendarmería marroquí le requisó entonces el pasaporte y la mandó de vuelta a España.