Cuarenta subsaharianos sin billete sembraron ayer el caos en el servicio de Cercanías de Barcelona al huir despavoridos por los túneles de la estación de Sants ante la presencia del revisor. El incidente obligó a Renfe a interrumpir cuatro líneas de ferrocarril de la capital durante una hora, lo que provocó que miles de pasajeros se vieron afectados por los retrasos.

El incidente se originó a primera hora de la mañana cuando los inmigrantes, que volvían de una fiesta de disfraces en la localidad de Salou, accedieron a uno de los convoyes. Ninguno de ellos compró billete, por lo que los problemas empezaron cuando el revisor les reclamó los tickets. Ante su requerimiento, un abogado que acompañaba a los subsaharianos espetó al inspector que no tenían por qué llevarlo. A partir de ahí se desataron los incidentes. Al viajar también indocumentados, el revisor del tren notificó el suceso a sus superiores y a la Policía.

El problema se agravó cuando el convoy llegó a Barcelona. Tras parar en la estación de Sants, los inmigrantes se encontraron con una gran presencia policial en el andén. Los Mossos d’Esquadra les solicitaron que se identificaran, momento en el que empezaron a correr para escapar del cerco policial. Un grupo optó por huir adentrándose en el túnel de la estación de Sants, por donde circulan los trenes, y otro por intentar sortear a los agentes corriendo hacia la calle.

La persecución de los agentes por los túneles y por la terminal obligó a cortar el servicio de tren de las líneas de cercanías 7, 3, 4 y 1 entre las 8.30 y las 9.25 horas, si bien los retrasos se prolongaron hasta mediodía. La persecución policial se saldó con 22 detenidos, todos ellos inmigrantes indocumentados, que fueron trasladados a las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía en cumplimiento de la Ley de Extranjería. Siete de ellos, de nacionalidad senegalesa, quedaron arrestados por inmigración irregular.

Devolución del dinero

Pese a que la afluencia de usuarios del tren era ayer inferior al de un día normal, ya que Barcelona celebra sus fiestas patronales y buena parte de la población se había marchado de puente, Renfe admitió que el corte supuso una «afectación importante». Tanto, que la compañía ferroviaria tomó la decisión de compensar con billetes gratis a los miles de pasajeros afectados.

En un principio, Renfe se negó a ello, pero ante la insistencia y la indignación de los afectados, finalmente accedió a devolver el dinero. Los usuarios, una vez más, mostraron sus quejas. «Siempre estamos igual, si no es por una causa es por otra», afirmó una afectada. «Nadie nos ha dicho nada, sólo que ha habido una incidencia. Un buen número de viajeros aseguraron que tomarán medidas y denunciarán los hechos.