Tan dura fue la polémica que se levantó tras destaparse que la Policía fijaba cupos de detenidos extranjeros que desde el Ministerio del Interior se emitió una nota pública aclarando cuál iba a ser la actuación policial ante los inmigrantes indocumentados. En dicha nota dejaba claro que no debían existir cupos de detenidos.

Se indicaba que el propio ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, había ordenado a su director general de la Policía y de la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, que dictara instrucciones oportunas «con el fin de clarificar el marco de actuación policial a la hora de aplicar la Ley de Extranjería». Era la manera de admitir que no se estaba trabajando correctamente. «Los planes operativos de las diferentes unidades policiales establecerán únicamente objetivos cualitativos, atendiendo prioritariamente a la problemática delincuencial que se produzca en determinadas zonas y periodos de tiempo», indicaba la nota.

Interior tuvo que aclarar a la Policía que no actuaría fijando cupos mensuales de detenidos ‘sin papeles’, aunque aclaraba que podía actuar contra ellos si incumplían la Ley de Extranjería.