El Ayuntamiento dice que la ocupación de la vía pública por los masajistas es ilegal Los chinos que dan los masajes en el distrito Centro no son inmigrantes ilegales y su práctica terapéutica tampoco vulnera la ley, según afirmó a este periódico una portavoz del Cuerpo de Policía Municipal de Madrid. La única cuestión que puede ser considerada ilícita en esta actividad es la ocupación de la vía pública, y eso es lo que los agentes intentan combatir.

El procedimiento policial es impedir que los masajistas ocupen las calles, sin poner ninguna sanción. Sin embargo, no es una tarea sencilla. Los orientales llevan consigo solamente sus sillitas y carteles, que pueden ser desmontados y escondidos de forma rápida. Además, sus materiales son fácilmente transportados a otro sitio donde vuelven a ser montados.

Otro punto a favor de los trabajadores orientales es que saben por dónde se mueven los agentes, puesto que se colocan en lugares turísticos de fuerte presencia policial. «Ellos están muy pendientes de nuestros movimientos», señala la portavoz municipal. A cualquier señal de peligro, recogen sus cosas y son difíciles de seguir en medio de la multitud.

El Cuerpo de Policía Municipal no considera el masaje chino una práctica ilegal. «Ellos no engañan a las personas, no se pasan por profesionales titulados», añade la portavoz. La actividad sólo se tipificaría como delictiva si los orientales se publicitaran como médicos o utilizaran un diploma falso. Y todavía «no hay ninguna denuncia registrada» por este motivo.

Los masajistas chinos tampoco tienen problemas de documentación, según la Policía Municipal. Los agentes les piden el permiso de residencia y no han encontrado irregularidades en los papeles presentados.

Hasta el momento, la policía afirma tener controladas a ocho personas que ejercen el masaje chino en lugares turísticos, como la Plaza de España y los jardines de Sabatini. Sin embargo, no se ha encontrado ninguna relación sospechosa entre esos masajistas, que presuntamente actúan de manera individual. «No hay indicio de que constituyan una mafia», explica la portavoz municipal.

El Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid sugirió la semana pasada que los orientales podrían trabajar para una mafia. La Policía Municipal lo niega y garantiza que investigará cualquier denuncia al respecto.