El Mediterráneo se traga a 73 inmigrantes en Italia

La Razón, 22-08-2009

Roma – El viaje desde la miseria africana hasta el sueño europeo vuelve a cobrarse un peaje en víctimas mortales. 73 personas, en su mayoría de nacionalidad eritrea, habrían perdido la vida cuando intentaban llegar a Italia desde las costas libias. Iban acompañados de otros cinco clandestinos que, milagrosamente, lograron sobrevivir y llegaron demacrados hasta Lampedusa en una patrullera italiana. «Partimos hace más de 20 días de Libia 78 personas. Nosotros hemos sido los únicos supervivientes. Nuestros compañeros morían y nosotros tirábamos al mar sus cadáveres», contaron a su llegada al puerto los supervivientes. Según su relato, al sexto día de viaje la embarcación se quedó sin combustible. También se fueron acabando el agua y el alimento y los teléfonos móviles agotaron su batería, por lo que pedir ayuda fue imposible.
Tirados en alta mar
Los inmigrantes pensaron que podría venirles auxilio de alguno de los diez barcos con que se cruzaron, pero sólo un pesquero les dio algo de agua y de comida. Cuando estaban a punto de desfallecer apareció una patrullera de Malta que les ofreció carburante y les indicó que se dirigieran a Lampedusa. «Nos indicó la ruta y se alejó sin ayudarnos pese a nuestras malas condiciones. Tuvieron hasta que arrancar ellos el motor porque nosotros no teníamos fuerzas para hacerlo», ha contado uno de los cinco supervivientes.
El Gobierno ha abierto una investigación para verificar si es cierto el relato de los clandestinos y comenzó ayer a peinar las aguas del Canal de Sicilia en busca de los cuerpos de los 73 fallecidos. La Conferencia Episcopal Italiana ha levantado la voz ante esta situación y por medio de su diario, «Avvenire», ha acusado a Occidente de «mirar hacia otro lado, como con el Holocausto».

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