«Aquí ya no se puede vivir». Así se manifestaba ayer una vecina de 84 años que lleva viviendo ya 47 en la conflictiva barriada palmesana de Son Gotleu y que la noche del jueves fue testigo de una multitudinaria pelea entre personas de etnia gitana y de origen subsahariano, en su mayoría de nacionalidad nigeriana, que habitan en esta zona de la capital balear y que se saldó con dos heridos graves por arma blanca

Son Gotleu, una de las barriadas más humildes de Palma, vivió ayer una jornada de calma tensa tras los graves incidentes de la noche anterior, que terminaron con varias decenas de heridos de diversa consideración, una veintena de coches destrozados, y un despliegue policial sin precedentes en esta zona. Más de cien agentes se desplazaron hasta Son Gotleu para restablecer el orden.

Por unas gafas

El origen de esta multitudinaria pelea – en la que llegaron a participar de forma directa o indirecta alrededor de un millar de personas – se encontraría, curiosamente, en una disputa que en un primer momento parecía sin mayor importancia entre dos personas por la propiedad de unas gafas de sol. Al parecer, a una mujer de etnia gitana que viajaba por la zona en un vehículo a primera hora de la noche se le cayeron sus gafas de sol, que fueron recogidas por un joven de color. Éste se negó a devolver las gafas a la mujer «porque se las había encontrado en el suelo», y entendía que se las podía quedar.

A partir de ese instante, se fueron sumando a la discusión el acompañante de la citada mujer y otras personas que se encontraban en las inmediaciones, pasándose en pocos minutos de una acalorada discusión verbal a un enfrentamiento físico, que incluyó golpes, agresiones y lanzamiento de botellas.

Cargas policiales

Los disturbios no remitieron por completo hasta bien entrada la madrugada, por lo que la Policía obligó a cerrar todos los bares y establecimientos que aún estaban abiertos y desvió también el tráfico. Los agentes del CNP de la Unidad de Prevención y Reacción tuvieron que pedir refuerzos a la Unidad de Intervención Policial. De hecho, los efectivos de ambas unidades se vieron obligados a efectuar dos cargas y a lanzar pelotas de goma.

A lo largo de toda la jornada de ayer, hubo una discreta presencia policial en la zona, si bien la mayor preocupación radicaba en que los incidentes se pudieran reproducir una vez entrada la noche.

Este enfrentamiento puede contribuir a enrarecer aún más el difícil clima de convivencia que hay desde hace aproximadamente una década en Son Gotleu. La tensión en esta zona se ha agudizado en el último año debido a los problemas de entendimiento cada vez más frecuentes entre los vecinos que llevan varias generaciones viviendo y trabajando en la barriada, y las personas inmigrantes.

En este contexto, el presidente de la Asociación de Vecinos Orson Welles de Son Gotleu, Ginés Quiñonero, responsabilizó ayer de lo ocurrido a lo que el llama la «inmigración violenta», que, en su opinión, habría llegado a la barriada a partir de 2001. Quiñonero anunció que para la próxima semana está prevista la celebración de una asamblea vecinal para preparar distintas movilizaciones contra el actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma, que preside la socialista Aina Calvo, al que se responsabiliza de no actuar en la zona con medidas sociales que puedan favorecer la convivencia.