Las autoridades de Italia y Malta buscan a 75 inmigrantes eritreos que viajaban en una lancha y que supuestamente murieron y fueron arrojados al mar cuando se dirigían hacia Italia. Mientras, un nuevo desembarco masivo de inmigrantes se registró ayer en la isla italiana de Lampedusa con la llegada de 45 varones indocumentados.

Las autoridades maltesas han recuperado del mar cuatro cadáveres, que podrían formar parte de un grupo de 80 inmigrantes que viajaban en una barca y de los que sólo han sobrevivido cinco, quienes han informado del suceso.

Según informan los medios de comunicación locales, los cinco sin papeles eritreos, que fueron rescatados por la Guardia de Finanzas italiana, aseguran que 75 personas murieron durante la travesía y que sus cuerpos fueron lanzados al mar.

Los inmigrantes explicaron a los servicios sanitarios que les atendieron a su llegada a Lampedusa, la puerta italiana de entrada a Europa, que habían partido de las costas libias hace unos 20 días.

Las autoridades italianas están valorando la veracidad del testimonio de los supervivientes y mantienen la cautela ante la información que éstos han suministrado.