El 60% de los crímenes se produce en cascada dentro de un periodo    de cinco días por un «efecto de imitación».
 

MADRID – Un 11,5% de las víctimas mortales a manos de sus parejas o ex parejas rechazó la protección durante los primeros seis meses del año, lo que contrasta con el 0% del mismo periodo del año pasado, de acuerdo con el balance de homicidios por violencia de género presentado ayer por el Ministerio de Igualdad.
El delegado del Gobierno para la violencia de género, Miguel Lorente, destacó que, a pesar de que la cifra de fallecidas ha disminuido –ha pasado de 32 a 26 de enero a junio, la menor cifra desde 2003–, se ha producido un fenómeno de «relajación» por un exceso de «confianza en el sistema».
Aunque ha crecido el número de solicitudes de orden de protección, lo que se traduce en «una percepción del riesgo inicial más alta», una de cada diez víctimas la acaba rechazando. Esto se debe, de acuerdo con Lorente, a que «se reduce la percepción de peligro en la fases avanzadas», posiblemente a causa de que el entorno de la víctima –familiares, amigos, compañeros– «minimiza el riesgo».
El 38,5% de las víctimas mortales había presentado denuncia, frente al 27,6% del primer semestre de 2008, y ninguna había retirado la acusación, cuando entonces lo hicieron el  6,9%. «No hay que dar una segunda oportunidad al maltratador», resaltó Lorente, que pidió «no bajar la guardia» y estar «alerta» durante el proceso de denuncia por maltrato hasta que se «normalice la situación».
Volviendo a las cifras, destaca el repunte de homicidios a manos de ex parejas frente al de actuales parejas (57,7%, un aumento de 16 puntos). El 34,6% de los homicidas es extranjero, mientras que sólo un 26,9% de sus víctimas lo era (un 41% y un 38% en 2008).
El número de denuncias se mantiene, sin embargo, estable, con una media diaria de 374, de las que el 45% fueron presentadas por mujeres inmigrantes.
La mayoría de los homicidios se produce en vacaciones, sobre todo en agosto, debido a que se «convive durante más tiempo y varía la rutina», aunque, según el delegado del Gobierno, existe un «factor de imitación» que provoca que, cada vez que hay noticia de un homicidio «pasional», se produce una cascada de crímenes en los cinco días siguientes, que concentran hasta el 60% del total.