Un barco que transportaba alrededor de 200 inmigrantes haitianos naufragó el lunes frente a las costas de las islas británicas Turcos y Caicos, en el Caribe, anunciaron los servicios de guardacostas estadounidenses que se unieron a los servicios de salvamento de las pequeñas islas.
Fueron rescatados 113 pasajeros con vida y recuperados algunos cadáveres. Unas 80 personas seguían ayer desaparecidas mientras buceadores y navegantes se afanaban por encontrarlas. Entre los supervivientes, cuatro heridos de gravedad fueron evacuados para ser atendidos. Desde Miami (Florida) fue enviado un helicóptero HH – 65 para participar en las operaciones de rescate.

BANDERA DE FORTUNA // Por el lugar del naufragio, probablemente el barco se dirigía a las Bahamas. Las islas Turcos y Caicos se encuentran a unos 160 kilómetros al norte de Haití. El accidente reprodujo, una vez más, los habituales tópicos de estas tragedias: un barco viejo y sobrecargado de pasajeros que hizo una parada imprevista para embarcar a unas 60 personas más.
«Esas embarcaciones suelen ser grandes veleros sin motor equipados con banderas de conveniencia», informó a la Agencia France Presse la portavoz de los servicios estadounidenses, Jennifer Johnson. «Nos hemos concentrado en localizar a los desaparecidos para saber si entre ellos hay supervivientes. Esa es nuestra prioridad de momento».
Cada año varios centenares de haitianos huyen del país más pobre del continente americano y surcan con embarcaciones inapropiadas para esas travesías unas aguas infestadas de tiburones y amenazadas por tormentas y ciclones. La mayoría de ellos intentan franquear los 1.100 kilómetros que separan su país de las costas de EEUU, pero muchas veces se ven forzados a dirigirse a las islas británicas de Turcos y Caicos o a las Bahamas.
Otros náufragos mueren cuando viajan en transbordadores de un puerto a otro de Haití. El convenio migratorio firmado entre EEUU y Haití en 1981 establece que todo inmigrante indocumentado interceptado por las autoridades estadounidenses debe ser repatriado.