Vecinos de San Evaristo-La Paz exigen más vigilancia policial para mejorar la seguridad

Aseguran que la confrontación con los colectivos inmigrantes ha aumentado y reclaman medidas sociales para la integración

Las Provincias, T. R., 27-07-2009

Reuniones con música hasta altas horas de la madrugada, venta de drogas al menudeo en los pasajes, chavales que están permanentemente en la calle y una población inmigrante cada vez mayor. Son algunas de las situaciones que se producen en el barrio de Virgen del Carmen y San Evaristo-La Paz que provocan enfrentamientos entre los vecinos y han creado un clima de confrontación que en cualquier momento puede estallar. Así lo asegura el presidente de la asociación de vecinos de San Evaristo La Paz, Manuel Hernández, que ha reclamado una reunión urgente con la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y el concejal responsable del área de Seguridad, Juan Seva, para abordar este asunto.
Hernández considera que «el problema se podría atajar con una presencia más activa de la Policía Local y Nacional que patrulle el barrio de Virgen del Carmen y mantenga contactos con los vecinos y que la gente se siente más segura». Para el responsable de la asociación vecinal la solución de esta situación pasa también por establecer medidas sociales que contribuyan a que los chavales, especialmente los inmigrantes , encuentren espacios en los que poder realizar actividades y aprovechar así su tiempo libre».
Asegura que el polideportivo de Virgen del Carmen está infrautilizado y no existe una programación de actuaciones para los jóvenes, y recuerda que «en la zona existen varios equipamientos educativos, entre ellos el antiguo colegio Puig Campana, en los que se pueden desarrollar programas sociales de atención a estos jóvenes y evitar que estén en la calle». Hernández señala que para esta intervención con población inmigrante cuenta con el apoyo del director general de la Conselleria de Inmigración, Josep Maria Felip, que en septiembre visitará el barrio .
La confrontación entre colectivos en San Evaristo-La Paz ha llevado a Hernández a reunirse con otras entidades que trabajan con el colectivo gitano y marroquí con la pretensión de crear una federación de asociaciones que aúnen esfuerzos por mejorar la convivencia entre la población residente e inmigrante del barrio.

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