Los vascos con menor formación académica son más intolerantes hacia los inmigrantes al ver sus puestos de trabajo amenazados. Así se desprende al menos del Índice de Tolerancia hacia la Inmigración Extranjera realizado por el Observatorio Vasco de la Inmigración-Ikuspegi.
Los responsables del estudio, José Antonio Oleaga y Xabier Aierdi, han advertido de que la población vasca se sitúa en posiciones “intermedias o ambivalentes” en materia de tolerancia hacia la inmigración aunque “seguimos con un aprobado raspadito”. Si el índice de tolerancia se situaba en 51,78 puntos en el año 2007, se ha pasado a 58,74 puntos en 2008, pero se prevé que este año vuelva a descender, hasta situarse entre 53 y 55 puntos, como consecuencia de la crisis económica por la que “nos sentimos más amenazados o menos seguros”.
Según el estudio, cuanto mayor es el nivel formativo de la población vasca, “más tolerante, abierta, flexible y positiva se muestra ante la inmigración y viceversa”. Oleaga ha precisado que ello se debe fundamentalmente a que un mayor nivel de estudios suele implicar a su vez “trabajos mejores y mejor remunerados”. Por ello, advierte de que en este momento, “la inmigración extranjera compite más con las franjas de abajo que con las de arriba”. “Si los que vinieran de fuera fuesen informáticos indios o arquitectos albaneses pues igual esto funcionaría de otra manera”, ha señalado.
Euskaldun, universitario y menor de 45 años
También más tolerantes los estudiantes (63,71 puntos), que las personas activas (59,69), las que están en paro (57,58), las jubiladas, pensionistas o rentistas (57,51) y las que se dedican al cuidado del hogar.
A diferencia de lo que se podría pensar, son también más tolerantes las personas agnósticas o ateas (62,92) que las católicas, sean practicantes (55,86) o no (58).
Con todos estos datos en la mano, desde Ikuspegi concluyen que las personas más tolerantes se encuentran entre los menores de 45 años, euskaldunes, con estudios universitarios medios y superiores y que son además agnósticas o ateas. Además, se caracterizan por tener ingresos superiores a los 1.800 euros, ser de estatus alto, medio alto o medio y estar satisfechos económicamente. Ideológicamente se encuadran también en este grupo los que dicen ser de izquierda o centro izquierda, nacionalistas vascos y aquellos con sentimiento identitario vasco.
El grupo de ambivalente está asociado más a personas mayores de 45 años, erdaldunes, sin estudios o con estudios primarios, de estatus medio bajo, de ideología de centro, jubilados, católicos no practicantes, con ingresos de entre 601 y 1.800 euros, sin posicionar entre los nacionalismos y con sentimiento identitario vasco-español.
El grupo de reacios, por su parte, se asocia con personas mayores de 45 años, sin estudios o con estudios primarios, de estatus bajo y medio bajo, de ideología de centro y derecha, jubilados y amas de casa, católicos practicantes, insatisfechos económicamente, con ingresos menores de 600 euros, nacionalistas españoles y con sentimiento identitario español.