La inmigración no es un problema para los bilbainos

Deia, Joana Pérez, 27-06-2009

bilbao. El estudio Percepciones y actitudes de la población bilbaina hacia la población extranjera 2009 revela que los autóctonos no consideran la inmigración como un problema. En el trabajo sobre 800 encuestas realizado por Ikuspegi, el Observatorio Vasco de Inmigración, se concluye que en ciertos aspectos la población bilbaina se muestra abierta a las aportaciones que la comunidad inmigrante pueda dar mientras que en otros mantiene cierto recelo. El principal punto sobre el que se manifiestan más abiertos es sobre la contribución cultural. En cambio, en el derecho al voto o el acceso a VPO son más restrictivos.

En la villa hay empadronadas 28.372 personas de origen extranjero, lo que supone un 7,98% del total. El perfil tipo del inmigrante es una mujer latinoamericana de entre 25 y 44 años que realiza trabajos de cuidado y atención de personas. Ellas son casi un 34% de la población inmigrante. Bolivia y Colombia encabezan el ranking, seguidos por Rumania y Marruecos. Y son, precisamente, estos dos países englobados en la Europa del Este y el Magreb junto con los asiáticos los que peor imagen tienen para los bilbainos, tanto en grado de integración como de simpatía, ya que se quedan por debajo del 5.

En las respuestas de las encuestas sólo el 2,2% de los entrevistados señalaron espontáneamente en la primera mención a la inmigración como principal problema, mientras que en el total de referencia ese porcentaje aumentó hasta el 15,6. Posteriormente se sugirió un grupo de respuestas y ese porcentaje en la primera cita bajó hasta el 1,3 como también se redujo en el total hasta un 14,6. Sólo un 1,3% señaló a la inmigración como un problema personal en la primera mención mientras que en el total creció hasta el 8%.

“Demasiados” La visión de una gran presencia de inmigrantes provoca que los ciudadanos bilbainos piensen que un 17,6% de los empadronados en la capital vizcaina son de origen extranjero frente al 7,98% real. “Muchas veces aquello que es novedoso se ve como una cifra y se le da una importancia y un volumen mucho mayor del que tiene”, explicó Xabier Aierdi, director de Ikuspegi, quien añadió que en otra de las preguntas el 74,3% los bilbainos respondieron que el número de inmigrantes era “demasiado”. Y aunque no se perciba como un problema, la mitad de la ciudadanía cree que la llegada de más inmigrantes puede afectar negativamente a su seguridad o la de su familia.

Una contradicción se produce en la integración de los inmigrantes en la sociedad. Un 53,7% piensa que es bueno para la diversidad cultural pero a su vez un 77,2% señala que son los inmigrantes quienes deben esforzarse para conocer la cultura y tradiciones. “Sobre el papel creen que la llegada de personas es positivo. Entienden también que para la convivencia cotidiana hay que articular algunos elementos comunes que nos permitan la convivencia con esa población inmigrante, como son el idioma o costumbres”, expuso José Antonio Oleaga, director de investigación de Ikuspegi. En este sentido, los bilbainos ven positivamente que los inmigrantes abran restaurantes exóticos, comercios propios, tengan sus propios establecimientos de alimentación e incluso que hablen su propio idioma. Tampoco ven mal que vistan como en su país de origen o que construyan templos para sus religiones. Sin embargo, no les gusta que ocupen plazas y espacios públicos y menos que tengan centros de enseñanza propios.

En relación al acceso de servicios y derechos, cree que el derecho a la educación y a la asistencia sanitaria pueden tenerlos todos los inmigrantes pero en el lado opuesto se sitúan la posibilidad de votar así como a recibir una vivienda de protección oficial donde el apoyo se queda en torno al 20%.

Para concluir, este estudio indica que un 77,4% de los bilbainos cree que se debería permitir la entrada de extranjeros si tienen contrato laboral frente a un 13’3% que piensa que no debería de haber ningún obstáculo.

Mayor movilidad de los inmigrantes

De momento, la crisis no ha hecho mella en la percepción que sobre la inmigración tienen los bilbainos. “Creo que hay que esperar un año más porque si los datos del año que viene indican un retroceso, entonces estaríamos hablando del efecto de la crisis. Antes había una funcionalidad muy clara de la inmigración”, apuntó Aierdi quien destacó la predisposición de la población inmigrante a cambiar de residencia para buscar trabajo. “No tiene las limitaciones para no moverse o de quedarse quieto. Si no encuentra un sitio se va a ir para otro. En cambio, el autóctono demuestra que puede quedarse estancado”, apuntó. El aumento del paro incide en que en los puestos de trabajo que antes solía realizar un inmigrante los quiera también un autóctono por lo que se produce un pequeño enfrentamiento. “La gente de esta sociedad con menos posibilidades de inserción laboral, con menos estudios, que trabaja en puestos de menor cualificación, son los que entran en competencia con la población extranjera. Ahora esos puestos son apetecibles e interesantes para determinado grupo de población”, concluyó el director de Ikuspegi. >j.p.

los datos

· 800 encuestas. El estudio se ha basado en las respuestas de 800 personas mayores de 18 años.

· 8 distritos. Se realizaron 100 encuestas por cada uno de los distritos de Bilbao.

· Trabajo de campo. La investigación se llevó a cabo entre el 20 de abril y el 20 de mayo.

la cifra

7,98%

· 28.372. Es el número de inmigrantes empadronados en Bilbao, lo que supone un 7,98% de la población total.

· Latinoamérica. Los inmigrantes de Latinoamérica representan alrededor del 60%.

la frase

“A lo novedoso se le da una importancia y un volumen mucho mayor del que tiene”

xabier aierdi

Director de Ikuspegi

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