Este fin de semana se celebran en la Ciudad Universitaria de Madrid los primeros Juegos de la Integración, que reúnen en la a dos mil participantes de cuarenta nacionalidades con alguna discapacidad física, así como inmigrantes no asentados en España por no tener los papeles en regla. La impulsora del proyecto es Gema Hassen – Bey, que se quedó parapléjica en un accidente de coche y ha optado por tomarse la vida con optimismo. En su silla de ruedas ha ganado ya tres medallas y volverá a participar en la modalidad de esgrima.
La capacidad de superación de esta valiente española es algo que no tienen todos su paisanos. Zapatero, por ejemplo, nos asombra con sus maniobras escapistas cada vez que las cosas le vienen mal dadas. Su última espantada fue al perder las europeas cuando pareció que se lo había tragado la tierra. Una vez más le tocó a la vicepresidenta el papelón de dar la cara, pero De la Vega fue incapaz de soltarnos una de sus arengas. Demudada y lívida, dejó a Rubalcaba dar su versión de los hechos. Esperemos que no haya una epidemia de «avestrucismo» en el gobierno, porque la dramática situación nacional requiere una valentía como la de Gema Hassen – Bay y sus compañeros. Suerte a todos ellos en estos juegos.