donostia. Este experto en psiquiatría comunitaria y drogodependencia se burló ayer de los estereotipos durante la conferencia ofrecida en el I Encuentro Interprofesional sobre Menores Extranjeros no Acompañados , organizada por SOS Racismo en la UPV de Donostia.

El trabajo que ha realizado para el Gobierno Vasco se basa en entrevistas personales con los menores. ¿Ha sido difícil llegar a ellos?

En algunos casos, ha habido mucha resistencia, porque tienen miedo, porque no tienen papeles, porque les cuesta abrirse… Sin embargo, tarde o temprano acaban contando su vida, en la mayoría de los casos con experiencias muy duras, sobre todo para atravesar el Estrecho.

Su ponencia se titula ‘Menores y Drogas’ ¿Qué relación hay entre ese binomio en el caso de los jóvenes extranjeros?

No es cierta la vinculación tópica que se da de menor inmigrante – marginación – uso de drogas. Esta visión no se corresponde con la realidad, ni de lejos. Es verdad que hay chavales que consumen drogas, pero no todos. Lo hacen en la misma proporción que los jóvenes de aquí.

¿No se da un porcentaje mayor entre los menores acogidos?

No. Hay distintos tipos de inmigrantes . Hay algunos que consumían en sus países y aquí también lo hacen. Hay otros que, durante su dura experiencia migratoria empezaron a drogarse para apartar el miedo a subirse en la patera o a meterse en los bajos de un camión. Y luego hay otros, muchos, que ni consumían en su país ni lo hacen aquí.

A los que toman sustancias, ¿es su situación de marginalidad lo que les empuja a ello?

En la mayoría de los casos, no. Los que se drogan, lo hacen por las mismas razones que los chavales autóctonos, es decir, por curiosidad, por establecer relaciones sociales, por acercarse a otros jóvenes…

¿Hay inmigrantes que consumen porque han tenido una vida dura?

Hay una bolsa de menores con dificultades y estrés por las duras experiencias vividas. Bajo estas circunstancias, son más vulnerables y eso es un factor de riesgo, pero no significa necesariamente que consuman.

¿Qué tipo de sustancias toman?

Consumen alcohol, tabaco y canábicos en igual medida que los chavales de aquí. La única diferencia es que los magrebíes toman hachís y los latinoamericanos marihuana.

¿No inhalan también pegamento y disolventes?

Sí se dan casos, sobre todo entre magrebíes y subsaharianos. Muchos de ellos son gente muy tirada , que lo ha pasado muy mal. Algunos, comenzaron a tomar estas drogas en Tánger o en Ceuta, donde pueden pasar días o meses sin hacer nada, esperando su momento para atravesar el Estrecho escondidos vete a saber dónde y muertos de miedo. Los más débiles, se drogan para quitarse el miedo, porque si no, a ver quién se atreve a hacer lo que hacen.

¿No cree que haya un problema con este tema?

No existe un problema gordo, a no ser que también lo haya con los menores autóctonos.

Pero son menores tutelados por instituciones públicas y toman droga…

Por supuesto, hay que aspirar a que los menores no caigan en el consumo de este tipo de sustancias porque no tengan otra cosa que hacer en el centro de acogida, por ejemplo. Es necesario rellenar de forma lúdica o educativa su tiempo, con talleres ocupacionales, aprendizaje laboral…