La mayoría son entre mujeres españolas y hombres de origen marroquí Lleida

La Fiscalía de Lleida investiga una posible red de organización de matrimonios de conveniencia que actuaría en pequeños pueblos de la demarcación de Lleida. La alarma saltó tras detectar los últimos meses un notable incremento de bodas entre personas de nacionalidad española y extranjera en varios municipios. De hecho las primeras pesquisas han llevado a solicitar la anulación de una veintena de enlaces.

En concreto, en uno de los casos que motivaron el inicio de la investigación hace tres meses, el testigo de una boda en Alcoletge (Segrià) era un hombre que se había casado hacía poco en el mismo ayuntamiento. Precisamente en esta localidad fue dónde se empezó a buscar pistas de la posible red.

Según ha explicado el fiscal, Juan Boné, por ahora se plantean la anulación de una veintena de bodas, la mayoría entre mujeres españolas y hombres extranjeros, casi todos de origen marroquí. A parte de Alcoletge, otras localidades en las que se ha detectado indicios de esta práctica fraudulenta son Torrefarrera, también en el Segrià, o Tàrrega, en el Urgell.

Cabe destacar que, a parte de las 20 bodas ahora puestas en duda, desde principios de año hasta el 1 de abril el Registro Civil de Lleida había denegado seis enlaces por presentar indicios claros de falsedad. Además, tiene pendientes de confirmación otros 25. Sin embargo, estos datos corresponden sólo a Lleida ciudad, no al resto de la demarcación.

Precisamente es a causa de que la comprobación de la autenticidad sea más relajada en los municipios pequeños que la red se servía de ellos para actuar. Para remediarlo, el fiscal confirmó esta semana que se ofrecerá formación a los jueces de paz de estos pueblos para facilitarles así más herramientas para detectar los casos fraudulentos. Hasta ahora se utiliza el tradicional cuestionario con preguntas acerca del trabajo del cónyuge, del inicio de la relación u otros detalles de la vida cotidiana, que se ha manifestado insuficiente.

La investigación ya ha detectado casos de separación inmediatamente después de contraer matrimonio, ya sea por vivir en domicilios separados o, directamente, porque uno de los contrayentes abandona el país para dirigirse a otro estado de la Unión Europea. Sin embargo, Boné matizó que es muy difícil formalizar imputaciones porque no hay una tipología específica en el Código Penal y no se puede tramitar como delito sino como petición de anulación del matrimonio.