LOS ANGELES (AFP) –
Más de 80 pandilleros fueron arrestados el jueves en Los Angeles bajo acusaciones de atentar contra la policía y atacar a ciudadanos negros en distintos barrios del sur de California (oeste), en la redada más grande contra pandillas latinas en la historia de Estados Unidos.

Según la fiscalía de Los Angeles, un amplio operativo de las agencias federales y locales, con el apoyo de 1.400 efectivos policiales realizaron las detenciones de 88 miembros y aliados de la pandilla The Varrio Hawaiian Gardens.

La pandilla era perseguida desde hace años por sus conocidas batallas callejeras con otras pandillas y atacar de forma sistemática a residentes negros en barrios del sur de Los Angeles.

“Los ciudadanos de (el sector) Hawaiian Gardens han sido testigos de intimidación, fanatismo y violencia étnica en cada esquina durante décadas”, dijo Salvador Hernandez, asistente del director de la oficina de la policía federal (FBI) de Los Angeles.

Los arrestos del jueves tomaron como blanco sobre todo a miembros de la pandilla que ya tenían cargos por posesión de armas de fuego, drogas y otros delitos, al realizarse esta operación por parte del FBI, la DEA y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.

Las autoridades de Los Angeles ya se habían enfocado en esta pandilla en 2005 cuando fueron señalados como sospechosos del asesinato de un comisario del Departamento del Sheriff del Condado de Los Angeles.

De acuerdo con la FLACSO y datos de los servicios policiales de Centroamérica, más de 200.000 jóvenes marginados, muchos de ellos deportados de Estados Unidos, integran las pandillas en esos países, mientras que en Estados Unidos el número podría ser áun mayor, según las policías locales.

El cobro de peaje en lugares públicos de grandes ciudades como Los Angeles, Chicago o Nueva York, sus alianzas con grupos del crimen organizado y asesinatos por ajustes de cuentas son temas que viven a diario barrios marginados en estas megalópolis.