La llegada de inmigrantes a España en pateras se ha reducido en más del 50% durante el primer trimestre del año, según dijo ayer la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, quien apuntó que por primera vez en abril no ha llegado ningún cayuco a Canarias. Rumí subrayó durante una rueda de prensa en Almería que, a lo largo de 2008, también hubo un importante descenso en la llegada de inmigrantes con respecto al año anterior, situado en el 22%.

La secretaria de Estado consideró que la crisis «claro que está teniendo un efecto» en esta reducción, puesto que el «único efecto llamada» que había hasta ahora era la posibilidad de incorporarse a un puesto de trabajo, lo que constituía el «imán que tenía España para muchos pueblos». «Como esa posibilidad ya no existe, evidentemente llegan muchos menos inmigrantes», añadió.

Junto a la situación económica, Rumí destacó como factores que también han permitido esta reducción los controles de fronteras, la cooperación en origen y al desarrollo, así como el funcionamiento de las patrullas mixtas que operan en países como Marruecos, Senegal y Mauritania.