donostia. Los miembros de SOS Racismo de Euskadi Mikel Mazkiaran y Zuria Arzua solicitaron a la Diputación de Gipuzkoa que, aunque sea un problema “difícil” de afrontar, “ponga todos los medios a su alcance para poder encauzar los procesos migratorios” de los menores extranjeros no acompañados que recalan en el territorio.

Mazkiaran reclamó, en este sentido, la puesta en marcha de “programas concretos” y que “no se diferencie a los menores en función de su conflictividad” siguiendo la teoría de que algunos de ellos “son recuperables y otros no”, ya que todos “pueden tener un buen proceso de integración si se ponen los medios adecuados”.

Sobre esta materia, el informe anual presentado ayer recoge, en un contexto más global, que este año se sigue anteponiendo la política de extranjería a la de infancia. Además, “se apuesta por negar por todos los medios la condición de menores de las víctimas más vulnerables de la inmigración”, según revela el informe.

En este sentido, el documento detalla que las diferentes administraciones de las comunidades autónomas “han intentado diversas estrategias” para no cumplir con sus obligaciones de tutela y protección. “Se ha tratado reiteradamente de demostrar la mayoría de edad de los menores, aunque contradiga las pruebas científicas y documentales”, revela el informe, en alusión a unos hechos ocurridos en Asturias y Cataluña que suscitaron muchas críticas. “La Xunta de Galicia también denunció al Gobierno de Euskadi por el envío irregular de menores a su comunidad, desentendiéndose de ellos”, refleja el documento. Varias organizaciones, entre ellas Human Rights Watch o el Defensor del Pueblo, han denunciado las condiciones de los centros de menores, poniendo un especial énfasis en los de las Islas Canarias.

actuaciones policiales Respecto a Bizkaia, Zuria Arzua, recordó que de las veinte denuncias por racismo recibidas por su asociación durante el año pasado en la oficina de Bilbao, “seis involucraban a las fuerzas de seguridad”, “principalmente” a la Ertzaintza, en actuaciones “discriminatorias cargadas siempre de xenofobia y racismo”.

Mazkiaran criticó a la Policía Municipal de Donostia por “confiscar mercancías” que los extranjeros venden en la calle “cuando se les sanciona por hacer venta ambulante sin permiso”, algo que, a su entender, “es contrario a la legalidad vigente”.