La Policía desmantela en Málaga una red de prostitución de menores sin recursos

ABC, PABLO D. ALMOGUERA | MÁLAGA, 11-05-2009

La Policía ha desarrollado en las últimas horas una importante operación contra una red de prostitución de menores que operaba a través de un pub del centro de Málaga y que captaba a adolescentes sin recursos que cobraban 20 euros por cada contacto sexual con hombres. El principal imputado es el propietario del establecimiento, un individuo que tiene antecedentes policiales por corrupción de jóvenes que no han cumplido la mayoría de edad. También fueron detenidos el camarero del bar, la pareja del propietario y un ex empleado. Este último fue puesto en libertad, aunque permanece imputado. Los cuatro arrestado son varones.

Según pudo saber ABC de fuentes próximas al caso, la intervención se llevó a cabo la madrugada del sábado como resultado de una larga investigación que se intensificó en las últimas semanas. Un amplio operativo de agentes de cuatro unidades distintas – Grupo de Estupefacientes de la UDEV, efectivos de la Comisaría Centro y miembros de la Ucrif y del Servicio de Atención a la Familia (SAF) – irrumpieron en el establecimiento, llamado «Embrujo» y situado en la calle San Juan de Letrán, cuando éste estaba abierto al público.

Por teléfono

La Policía arrestó como supuesto cerebro de la trama al propietario del local, un individuo con antecedentes por corrupción de menores que presuntamente se encargaba de entrar en contacto con los adolescentes vía telefónica y que cobraba por los servicios sexuales a los clientes. Las tarifas variaban en función de la edad del joven.

La mayoría tenían 16 ó 17 años y eran de nacionalidad rumana o de origen magrebí, aunque también había subsaharianos, pero en un porcentaje testimonial. Además, había jóvenes que acababan de cumplir los 18 ó 19 años. Coincidían en que eran de condición humilde, circunstancia que aprovechaba el cabecilla de la red para captarlos. Según las citadas fuentes, les solía pagar 20 euros por servicio, pero en ocasiones les entregaba una dosis de droga, habitualmente medio gramo de cocaína.

Uno de ellos, que fue localizado por los agentes y que prestó declaración en compañía de un familiar, es un adolescente cuya familia tiene dificultades económicas. El padre está en paro y los pocos ingresos que obtiene son por recoger chatarra. Cuando los agentes irrumpieron en el local no hallaron a ningún adulto practicando sexo con menores, pero las fuentes señalaron que hay pruebas suficientes, entre ellas declaraciones de adolescentes y de clientes, que confirman esta siniestra actividad.

El perfil de los clientes, que se ha podido trazar por las numerosas vigilancias realizadas, corresponde a individuos de edad media – algunos de unos 60 años – y de clase media o media – alta.

Tráfico de droga

Además del registro del pub, los agentes inspeccionaron el domicilio del principal inculpado, donde hallaron una balanza de precisión y una cantidad no precisada de cocaína. Las fuentes consultadas explicaron que la venta de esta sustancia era la otra gran vía de ingresos de los detenidos.

Los cuatro individuos han sido acusados inicialmente de corrupción de menores, de delitos relacionados con la prostitución y de tráfico de drogas.

Las fuentes consultadas señalaron que en los registros se incautaron de documentación que será analizada por si de ella se desprenden más hechos punibles o se identifica a otras personas susceptibles de ser imputadas.

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