Ayala empieza a tener miedo. la tranquila comarca alavesa ha visto cómo en los últimos días se suceden peleas violentas y los destrozos en coches. Vecinos de Respaldiza, Amurrio o Llodio han sido testigo del aumento de la violencia, acentuada desde las pasadas fiestas de San Prudencio. En Respaldiza, por ejemplo, ha cundido el temor hacia un grupo de chicos «de origen latinoamericano» que ha protagonizado «diversos altercados» en la última semana y media. «Se han producido peleas casi todos los días», explicó un testigo de varios de los enfrentamientos que se han sucedido desde la noche del 28 de abril.

En Amurrio también están preocupados. Varios residentes vieron los altercados de la madrugada del sábado en el barrio de San José de Amurrio, que también celebraba sus fiestas. En este caso, un grupo de inmigrantes habían organizado un partido de fútbol. Tras el encuentro «hubo personas que bebieron mucho» y poco después protagonizaron una «pelea multitudinaria», según la nota emitida por la Ertzaintza, en la que intervinieron dos vecinos de Amurrio. Uno de ellos, al intentar rescatar al otro, recibió un corte en el cuello con una botella rota y tuvo que ser trasladado al hospital de Cruces, donde fue atendido.

La Ertzaintza de la comisaría de Llodio recibió el aviso de que se estaba produciendo una pelea y acudió para detenerla, aunque varios de los implicados les hicieron frente, lo que derivó en que los agentes detuvieran a tres personas e imputaran a otras dos por los incidentes. Las investigaciones acerca de lo sucedido concluyeron el domingo con la detención del presunto autor de la lesión en Llodio.

Espejos rotos

Los incidentes no terminan ahí. También durante el fin de semana, Amurrio ha sido escenario de varios destrozos contra coches aparcados en las calles José de Madinabeitia y Dionisio Aldama.

Los gamberros han destrozado los espejos retrovisores de una decena de coches aparcados en la calle «arrancándolos del anclaje», según uno de los afectados.

Incidentes de este tipo suelen ser frecuentes tanto en Llodio como en Amurrio durante los fines de semana, cuando los ataques vandálicos al mobiliario urbano se multiplican.