trapagaran. La familia repudiada por los vecinos de La Arboleda por su supuesta conflictividad ya es legítimamente vecina de Trapagaran después de que ayer se empadronara en el Ayuntamiento de la localidad. El matrimonio, procedente de Sestao, acudió a censarse acompañada por un hijo y arropada por varios integrantes de Iniciativa Gitana, la asociación que está tutelando su caso desde hace varias semanas.

Tras formalizar este trámite, al que el Consistorio minero se ha opuesto durante meses, el representante de la asociación gitana de Barakaldo, Eduardo Motos, indicó que el grupo “está ya en condiciones de subir a la vivienda si no hay ningún otro cambio”. Este representante de los colectivos calés señaló que la familia se encuentra “mal” en la pensión en la que permanece alojada desde hace casi dos años porque dispone de dos habitaciones para compartir entre siete personas porque “no tienen otra cosa”.

Motos insistió en que todo el rechazo que están sufriendo tiene tintes racistas por lo que reiteró en la necesidad de darles una oportunidad “como tiene todo el mundo”. A este respecto, señaló que a esta familia “le ha tocado la vivienda y es muy digno que puedan vivir en ella”, y luego “sabremos si se comporta o no”, para lo que “las asociaciones podemos poner pautas en ese aspecto”.

La portavoz municipal, Pilar Souto, rechazó realizar declaraciones sobre el empadronamiento, aunque sí se refirió a la oferta puesta sobre la mesa hace días por las agrupaciones pro gitanas de rechazar el piso de La Arboleda a cambio de un inmueble digno en otro lugar del municipio. La concejala socialista aseguró sobre esta cuestión que el Ayuntamiento minero no está buscando ningún inmueble para negociar y dejó claro que la única propuesta que existe es la posibilidad de que ocupe la casa de Las Delicias, una posibilidad que la familia rechaza de plano debido a que se trata de un edificio que se encuentra fuera de ordenación.

El importante clima de rechazo y tensión que se ha vivido en el barrio minero cada vez que el matrimonio ha subido para intentar ocupar la vivienda ha despertado ciertos temores en el matrimonio, que tiene miedo sobre todo por la integridad física de sus cinco hijos, según dejaron claro la semana pasada integrantes de Iniciativa Gitana. No obstante, tienen claro que su única vivienda es la de La Arboleda y además la están pagando desde finales de 2008, por eso advierten de que ni so se produce ningún cambio a última hora, acabarán ocupándola.