burgos – Cáritas de Burgos está aplicando nuevas fórmulas para dar respuesta a las necesidades de alojamiento que están surgiendo en este momento de crisis, especialmente para atender a familias enteras, dado que su albergue no reúne condiciones para este tipo de acogidas.
El portavoz de la organización diocesana en Burgos, Alfredo Calvo, ha explicado que el albergue cuenta con 40 plazas en habitaciones y siempre está completo, aunque no es el lugar ideal para familias y Cáritas tampoco dispone de fondos para su adaptación. Se trata de atender a un nuevo perfil de persona necesitada que responde al aumento de carencias que provoca la crisis, que cada vez más afecta a familias que tienen una situación normal pero se quedan sin trabajo y sin capacidad para afrontar sus gastos cotidianos.
Alfredo Calvo ha puesto el ejemplo de una familia de inmigrantes argelinos cuyo cabeza de familia perdió el trabajo hace unos meses y ahora cobra una prestación social de 400 euros, mientras la mujer trabaja por horas y apenas llega a cobrar 200 euros. «Con ese dinero tienen que mantener a sus dos hijos y pagar una hipoteca que ahora no pueden afrontar, por lo que ya tienen acumulada una deuda de 5.000 euros, sobre todo por la hipoteca y el comedor escolar», detalló Cáritas Burgos.