Un subsahariano albino pide asilo para no ser usado en rituales

El Mundo, DANIEL G. LIFONA, 07-04-2009

«Mi cuerpo es codiciado para utilizarlo en brujería», asegura Madrid


Moszy tiene 18 años, es africano e inmigrante. Llegó en cayuco a Tenerife el pasado 29 de marzo, junto a otros 60 subsaharianos de distintas nacionalidades, pero, a diferencia de sus compañeros de travesía, él es blanco; albino, para ser exactos.


Cuando los servicios médicos acudieron a la playa tinerfeña de La Tejita, en el municipio de Granadilla, para atender a los recién llegados, esperaban encontrar lo de siempre: quemaduras, insolaciones, llagas provocadas por la sal, casos de deshidratación, desnutrición e hipotermia. Pero además de todo eso encontraron a Moszy, un negro con la piel blanca, casi transparente, por la ausencia total de melanina.


Hace una semana que se encuentra en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Hoya Fría, en Tenerife, y ahora ha pedido asilo político porque, según afirma, en su país es perseguido por los que participan en rituales mágicos. «Mi cuerpo es codiciado para utilizarlo en rituales de brujería», asegura.


Aunque el principal enemigo de los africanos albinos es la radiación ultravioleta del sol, también se exponen a la discriminación de sus compatriotas y a la superchería local, según informa Isabel Perancho. Las noticias hablan de persecuciones y asesinatos fruto de la creencia de que están hechizados y de que sus órganos atraen la riqueza.


Moszy teme literalmente que se lo coman. Según explica, se hacen auténticas barbaridades con el cuerpo de los albinos: los dedos son utilizados como amuletos y con su sangre se elabora el muti, una bebida que preparan los brujos locales con la creencia de que trae fortuna.


Fuentes del Centro de Internamiento de Hoya Fría aseguran que la relación del inmigrante albino con el resto de los internos es «absolutamente normal».


«No hemos notado que lo rechacen o que lo discriminen por su color de piel, la convivencia con sus compañeros es la habitual en estos centros», explicaron dichas fuentes, que no descartaron que Moszy haya «exagerado un poco» para tramitar su petición de asilo político.


«Seguramente se ha sacado de contexto», añadieron las mismas fuentes.


La próxima semana, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (Cear) tramitará la solicitud de asilo. Moszy es el segundo albino que llega a Canarias desde que comenzó la inmigración clandestina a las islas hace 15 años.

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