EEUU: Policía busca respuestas a masacre desatada por inmigrante desempleado

Prensa Libre, 05-04-2009

BINGHAMTON 2009 (AFP) –
La policía intenta este sábado unir piezas para descubrir por qué un inmigrante asiático desempleado asesinó el viernes en Estados Unidos a 13 personas y luego se suicidó, en el centro donde estudiaba inglés en la pequeña ciudad de Binghampton (noreste).


Desempleado y con dificultades para hablar inglés, Jiverly Wong, un inmigrante vietnamita de 40 y tantos años, primero bloqueó con su vehículo la puerta de salida trasera de la Asociación Cívica Estadounidense (ACA), un centro de ayuda para inmigrantes.


Wong entró entonces al edificio disparando sobre los alumnos que asistían a una clase de inglés, declaró el jefe de Policía Joseph Zikuski. Se suicidó luego de matar a 13 personas. Otras 37 personas que habían sido tomadas como rehenes se salvaron.


El homicida llegaba de la ciudad cercana de Johnson City, donde vivía con su madre.


“Creemos haber entendido que el señor (Wong) había perdido su empleo. Que el hombre no era extraño a la Asociación Cívica Estadounidense. Probablemente tomaba clases allí ", explicó el sábado el alcalde de Binghamton, Matthew Ryan, a la cadena CNN.


“Su manejo del idioma inglés no era tan bueno, y sintió que la gente lo estaba mirando con desprecio”, añadió. “Obviamente se trata de un individuo muy perturbado, al punto de llegar aquí ayer (viernes), y es todo lo que sabemos en este momento”.


CNN también informó que hace varios años Wong había trabajado en la empresa de alta tecnología Endicott Interconnect, que produce chips informáticos para equipamiento médico, donde Wong formó a trabajadores más jóvenes.


Más recientemente, señaló la cadena, Wong había estado trabajando en una tienda que usaba aspiradores para limpiar equipamientos industriales.


El hombre fue descrito como alguien apacible.


La masacre empezó durante la mañana del viernes y sólo habría durado unos minutos, aunque pasaron varias horas hasta que la Policía se asegurara de que no había más peligro.


“Sacamos a 37 personas vivas. Cuatro de las personas que sacamos están heridas” y “en condición crítica”, dijo el viernes Zikuski.


El jefe de Policía relató que recibieron un pedido de auxilio de una mujer que fue la primera a quien disparó el asesino. La mujer, recepcionista de la ACA, recibió un tiro en el estómago, tras lo cual simuló estar muerta hasta que pudo escapar y hacer la llamada.


El presidente estadounidense Barack Obama, que partipa en Francia y Alemania de una cumbre de la OTAN, dijo estar “conmocionado y profundamente acongojado” por el hecho.


Se trata de la peor masacre de este tipo en Estados Unidos desde la matanza en el campus universitario de Virginia Tech, en abril de 2007, cuando un estudiante de origen coreano mató a 32 personas y se suicidó.

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