Madrid – Los cuerpos sin vida de los más de 200 inmigrantes desaparecidos tras naufragar a cincuenta millas de África cuando intentaban alcanzar Italia a bordo de un pesquero comenzaron a llegar ayer a las costas de Libia. Varios cadáveres fueron avistados en Sabrata, 80 kilómetros al oeste de la capital, Trípoli.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó de que el balance provisional del naufragio es de al menos 214 desaparecidos, veinte muertos y no menos de veintiún rescatados. El pesquero, construido en madera y con una capacidad máxima de 50 tripulantes, naufragó la noche del lunes con 257 personas a bordo, informa Efe. Las probabilidades de que alguno de los desaparecidos haya sobrevivido son ínfimas, según la OIM.
Los medios oficiales libios todavía no han ofrecido ninguna información sobre las circunstancias del naufragio. La OIM envió ayer sendos equipos a los dos centros de acogida a los que han sido trasladados los supervivientes. En estos mismos centros se encuentran los 356 inmigrantes que estuvieron a punto de naufragar frente a las costas libias, también el lunes, a bordo de otro pesquero de madera, aunque tuvieron mejor suerte y fueron rescatados.