La Policía desmantela una red que explotaba a inmigrantes

El Mundo, JORDI RIBALAYGUE, 31-03-2009

Entre los 54 detenidos hay cabecillas y víctimas de la trama Badalona


La Policía Nacional lanzó ayer una amplia operación contra una red de explotación de extranjeros que se saldó con la detención de 54 personas en Barcelona, Badalona y Santa Coloma de Gramenet. Desde las 7.00 horas y hasta el mediodía, los agentes accedieron a una decena de inmuebles en los que se apresó a los supuestos integrantes de la trama. Todos son de nacionalidad china y se les acusa de tráfico de personas y falsificación documental, entre otros delitos. Entre los detenidos se hallarían algunas víctimas del grupo, que trasladaba a inmigrantes en situación irregular desde China. Según fuentes policiales, el operativo sigue abierto y podría fructificar con más arrestos.


El grueso de la actuación se centró en dos domicilios de Badalona.A primera hora de la mañana, los policías entraron en una vivienda de unos 50 metros cuadrados de la calle Vallvidrera en la que vivían hacinadas más de una decena de inquilinos. La policía arrestó a 18 individuos y se incautó de diversos materiales, documentación y una torre de ordenador. Luego la policía llevó a dos de los sospechosos hasta Santa Coloma para inspeccionar un restaurante de comida china de la calle Wagner. Según fuentes policiales, los jefes de la presunta red recibían en el local los documentos fraudulentos procedentes de Asia. Los cabecillas vendían los permisos y los carnés de residencia falsificados por unos precios que variaban entre 3.000 y 20.000 euros.


La operación siguió en otro piso de Badalona situado en la calle Saturn. El registro del ático duró hasta pasadas las 14.00 horas y los agentes detuvieron a seis hombres y cuatro mujeres. En la calle se hablaba de los gritos que se oían de madrugada y las peleas que los arrestados protagonizaban. «Hace tiempo que buscaban follón; una vez vi como uno pegaba a una mujer en la puerta», atestiguó Mikel, un joven de Llefià. Los apresados vivían de alquiler desde hacía unos ocho meses y solían regresar al piso pasadas las 22.30 horas, justificando que volvían del trabajo.


El presidente de la escalera, Rafael Cruz, aseguró que los ruidos eran «frecuentes» y que los implicados lanzaban por el patio «huevos y tomates» a los vecinos del segundo. Según el hombre, las condiciones de la vivienda eran «desastrosas» y habían instalado literas e improvisado un habitáculo en la terraza. Los vecinos pensaban presentar en breve una denuncia contra la propietaria del piso por deber a la comunidad unos 600 euros.


elmundo.es


/elmundo/barcelona.html


Vídeo:


Vea las imágenes de la operación.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)