… Ante la tragedia humana acaecida el pasado día 15 de febrero en las costas de Lanzarote, donde murieron 25 personas de ellas, 16 menores, no caben justificaciones. Y hasta se llega tarde en buscar qué fue lo que falló en el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE), pues no se logró el objetivo que da su razón de ser: evitar la tragedia. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, se desmarcó de lo ocurrido y apuntó directamente al Cabildo de Lanzarote como el responsable de las sombras, pues llegó a decir que impidieron a la Guardia Civil poner las cámaras donde hacía falta. Para rematar la faena, sólo le faltó añadir que ese día había mucha calima y ya hubiera sido la cuadratura del círculo.

… Las víctimas de la tragedia del día 15 de febrero son personas. Es una obviedad, pero parece necesario recordárselo al ministro cuando empieza a divagar sobre “un eco”, “unas condiciones meteorológicas muy malas”… sobre las causas. Eso sí, a la hora de pedir responsabilidades, el ministro Rubalcaba se cuida muy mucho de hacer autocrítica: “Alguna responsabilidad tienen ustedes (en relación al Cabildo)”, dijo primero, para luego, como quien pide perdón, añadir: “Aunque en este caso no tiene nada que ver la zona de sombra con el naufragio”.

… Menos mal que el día de la tragedia había marejada a fuerte marejada. Y claro, la culpa fue del oleaje. “Si el tiempo hubiera sido bueno, probablemente se hubiera visto la patera”. Realmente, las declaraciones de Rubalcaba son vergonzosas y están tardando, no sólo en CC y PP, sino en el seno de su propio partido, el Partido Socialista, en pedir responsabilidades. Pero sin comisiones, ni gestos de cara a la galería. Dicen que es de sabios reconocer los errores. Cuánto más dimitir por ellos.