EFE, Madrid

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer en el Senado que el rumbo, los movimientos y la proximidad a tierra de la patera que naufragó en Lanzarote el pasado 15 de febrero hicieron creer a la Guardia Civil que se trataba de una embarcación de recreo o de pesca deportiva.

Rubalcaba respondió así a la senadora del PP María Dolores Luzardo, que le había pedido explicaciones sobre la existencia de un informe interno del instituto armado que asegura que el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) detectó hasta en tres ocasiones la patera, que volcó a sólo veinte metros de la playa causando la muerte de veinticinco de sus ocupantes.

El titular de Interior replicó leyendo otro informe de la Guardia Civil en el que se explica que el radar del SIVE “no detecta embarcaciones, sino ecos”, y que cuando las características de éstos indican que puede haber una patera se trata de comprobar y, posteriormente, se avisa a los servicios de salvamento.

Rubalcaba agregó que, el pasado 15 de febrero, las condiciones meteorológicas eran “muy malas” y que, en esas situaciones, el radar “se autorregula” y baja la sensibilidad para evitar falsos ecos.

Cuando pasadas las 17:00 horas se detectó el primer eco, éste estaba tan cerca de tierra que “nada hacía pensar que no viniera de la propia isla”, señaló el ministro, quien agregó que “el rumbo tampoco era lógico”.