El sector agroalimentario es uno de los pocos que está capeando el temporal de la crisis y prueba de ello es que en la actualidad registra el menor número de parados, al menos en la comarca del Guadalentín. Sin embargo, los trabajadores agrícolas son los que más denuncias han presentado ante el sindicato de Comisiones Obreras (CC.OO) por las supuestas irregularidades que se producen en los contratos y las condiciones económicas que se establecen.

El secretario general de CC.OO en Murcia, Daniel Bueno, pidió ayer un mayor control de las empresas de trabajo temporal por parte de la Administración competente. «Es preciso reflexionar sobre los métodos de funcionamiento de estas empresas porque son muchas las irregularidades detectadas y en Lorca especialmente, sobre todo en el régimen agrario».

Como ejemplo, Bueno citó dos denuncias presentadas por trabajadores inmigrantes en situación legal en el país en las que se relata como desde una empresa de trabajo temporal se les cobró cien euros a cambio de un contrato de trabajo que transcurridos tres meses aún no se ha formalizado. «Este tipo de ilegalidades se están produciendo y hay que evitarlas. Nosotros queremos que el sector agrícola siga siendo fuerte, pero no a costa de explotar a los trabajadores, o saltarse el convenio colectivo. Es que se da el caso de estar cotizando por los trabajadores en función de horas y no de jornadas, y esto no puede ser».

Los inmigrantes son los más perjudicados por estas situaciones ya que son ellos los que engloban la mayor parte de la bolsa laboral agraria en el municipio. Bueno se refirió a la situación que están atravesando estas personas. «En los años noventa se produjo una crisis en la Región, pero entonces se daba el caso de que la familia apoyaba a la persona que se había quedado en paro. Lo que ocurre es que ahora en una misma unidad familiar hay más de un parado. En el caso de los inmigrantes es peor porque la mayoría no tienen en España una familia que les ampare, y muchos se están viendo obligados a marcharse si es que tienen dinero para hacerlo».

Bueno pidió a los empresarios agrícolas de la comarca que se «comprometan a dignificar el trabajo en el campo. No se puede seguir luchando por una agricultura competitiva a costa de las condiciones de los trabajadores. Habrá que mejorar su situación e invertir en desarrollo tecnológico y productos de calidad».

La sede local del sindicato se ha convertido en el último año en un valle de lágrimas para cientos de trabajadores que acuden en busca de una solución o un apoyo. El secretario de CC.OO en la comarca, Enrique González, remarcaba ayer que «son constantes las visitas de personas verdaderamente angustiadas que no saben qué hacer porque se encuentran sin empleo y con una casa y una familia que mantener. El paro en la comarca ha pasado de 4.500 desempleados en 2007 a 7.300. En Lorca, en 2007 había 2.272 parados y en enero de 2009 la cifra ya rozaba los 5.214 desempleados».