Convergència Democràtica de Catalunya le está cogiendo el gusto al fomento de las parejas lingüísticas, la relación entre un catalanohablante y una persona que no lo es, y que practican el idioma en conversación informal. Una iniciativa que tutela el militante más activo de CDC, Àngel Colom, especializado en la gestión de la casa gran del catalanismo y responsable de la sectorial de inmigración del partido. Primero fueron representantes de CiU en el Parlament, el Congreso, el Senado y el Ayuntamiento de Barcelona quienes dieron ejemplo y presentaron a sus parejas lingüísticas.
Ahora, CDC quiere que sus cerca de 50.000 militantes adopten esta práctica y para ello ha abierto una campaña que ayer presentaron el secretario general adjunto convergente, Felip Puig; la secretaria ejecutiva, Montserrat Candini, y el propio Colom. Los tres tienen planes ambiciosos en lo a que la expansión del catalán se refiere.
Puig advirtió de que los catalanes tienen que velar por la integración de los “nuevos catalanes” y aseguró que la identidad catalana “puede estar amenazada” si eso no se logra. El número dos de CDC aseguró que su partido considera vitales las políticas de inmigración, más si cabe en un periodo de crisis, y acusó al PSC de actuar respecto de los foráneos haciendo de ello “un recurso partidista y electoral”.
CDC se propone lograr con su iniciativa que haya 90.000 parejas lingüísticas dentro de un año y medio. Hoy, según Colom, existen unas 30.000. El exlíder de ERC anunció que en el proyecto de captación de parejas se implicará tanto a los militantes como a las 450 sedes convergentes, las 435 alcaldías de CiU y a los 3.387 concejales que tiene. Colom aseguró que los inmigrantes tienen “unas ganas inmensas” de aprender catalán, pero que no siempre logran estudiarlo.

BENACH, CON SU PAREJA
El proyecto de las parejas lingüísticas nació en la sociedad civil, es promovido por el Govern y es defendido políticamente sobre todo por CiU y por ERC. Los dirigentes republicanos también exhiben a los foráneos con los que practican el catalán.
Ayer lo hizo el presidente del Parlament, Ernest Benach, quien conoció a su pareja lingüística y se hizo una foto con ella en la sala de audiencias de la Cámara catalana. Es una australiana de nombre Julie. La pareja fue presentada por el secretario de Política Lingüística, Bernat Joan. Benach participa en el programa Voluntaris per la llengua, que impulsa, entre otros, el Consorci per a la Normalització Lingüística.