ROMA – Corresponsal

El alcalde acusa: “Ahora es un campo de concentración, los inmigrantes están exasperados”
Lampedusa, la isla italiana más próxima a África,asistió ayer por la mañana a violentos enfrentamientos entre policía e inmigrantes extracomunitarios del Centro de Identificación y Expulsión (CIE), que culminaron con el incendio de uno de los edificios. La revuelta, que fue sofocada horas después, surgió de la protesta de unos 300 tunecinos, que iniciaron una huelga de hambre contra la repatriación de 107 compatriotas, realizada el martes.

Balance citado anoche por la RAI, la televisión pública: 60 heridos, entre una cincuentena de inmigrantes contusionados o intoxicados por el humo, y diez policías y carabineros en similar situación. Según Girolamo Fazio, jefe de policía de Agrigento (isla de Sicilia), el grupo que protestaba inició la revuelta cuando otros inmigrantes decidieron comer. Intervino la policía y se desató una batalla. Los inmigrantes intentaron abrir las puertas valladas del centro, y luego amontonaron colchones, almohadas y cartones y les prendieron fuego. Uno de los edificios quedó totalmente destruido, y otros resultaron afectados. El fuerte viento, el difícil acceso y los pocos medios, dificultaron las tareas de extinción, efectuadas por seis equipos y un helicóptero.

“Las llamas alcanzaban hasta diez metros, la nube tóxica liberada por los paneles aislantes estaba llegando al pueblo”, dijo el alcalde de centroderecha, Bernardino De Rubeis. El alcalde acusó entonces al ministro del Interior, Roberto Maroni, de la Liga Norte: “Gracias a la obra de Maroni, hemos corrido el riesgo de que murieran inmigrantes, trabajadores del centro y población. Maroni ha transformado el centro en un campo de concentración, los inmigrantes están exasperados.” En el centro, repetidamente criticado por el Acnur, había ayer 863 inmigrantes, varones todos ellos, la mayoría tunecinos.

El pasado 24 de enero se produjo ya una espectacular protesta, cuando un millar de inmigrantes abandonaron el centro, y se dirigieron al Ayuntamiento a pedir “un trato más digno”. Según informaba ayer la edición digital de La Repubblica,el Ministerio del Interior ha transformado hace poco en CIE el antiguo Centro de Primera Acogida (CPA) de Lampedusa, en el que hasta ahora los inmigrantes pasaban menos tiempo.