El desempleo entre los trabajadores extranjeros ha crecido el 86,74% en un año y la cifra total se acerca cada vez más al medio millón de personas, en enero ya eran 449.505 parados. Desde octubre del año pasado esta cifra crece en torno al 10% cada mes y estos aumentos no parece que vayan a bajar mucho en los próximos trimestres. El problema es que estos trabajadores suelen ser contratados en trabajos precarios y muchos de ellos no logran un suficiente nivel de protección. De hecho, 137.552 no cobran ninguna prestación (contributiva, subsidio, renta activa de inserción o ayuda para eventuales agrarios) pese a que el número de beneficiarios extranjeros ha crecido un 104% en el último año y alcanza a 311.953 trabajadores. Esta cifra ha pasado de representar en el 2006 el 7,4% de todos los parados que cobran desempleo a suponer ya el 13,5%.