pamplona. La población de Navarra aumentará un 9,1% durante los próximos diez años, pasando de los 606.234 habitantes con los que cuenta en la actualidad a los 661.271, en el año 2018. Un dato que demuestra que, a pesar del descenso en el número de nacimientos de cara a la próxima década (en 2018 se registrarán unos 580 menos), el crecimiento natural o vegetativo continuará siendo positivo: 6.161 alumbramientos frente a 5.604 defunciones.

Según la proyección de población en el Estado a corto plazo para el periodo 2008 – 2018, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunidad Foral mantiene el mismo porcentaje de crecimiento demográfico obtenido en el anterior periodo 2002 – 2008, que también fue de un 9,1%.

Incremento que contrasta con la tónica que se vivirá en el resto del Estado, puesto que se prevé una desaceleración en la tasa de crecimiento de la población, desde el 1,8% anual registrado en 2007 hasta el 0,7% en 2010. Posteriormente, y hasta 2018, se estima una estabilización de dicha tasa.

Si se desgranan los datos por años se observa que, como ya se ha señalado, el número de nacimientos seguirá siendo superior al de muertes, aunque su diferencia se estrechará con el transcurso de la década. De esta forma, si en la actualidad se producen 1.788 alumbramientos más que muertes la comunidad, en 2012 esta cifra bajará a los 1.381, y en 2018 tan sólo habrá 557 nacimientos más que defunciones.

migraciones internas El crecimiento migratorio entre la Comunidad Foral y otras regiones del Estado, por su parte, continuará siendo positivo para Navarra, a pesar de que el número de inmigrantes llegados desde otras CC.AA. y el de emigrantes se reducirá sensiblemente en los próximos años.

Si hasta ahora la diferencia entre inmigrantes procedentes del Estado y emigrantes navarros era positiva en número: la comunidad ganaba una media de 728 habitantes; esta tendencia se mantendrá en 2018, puesto que Navarra seguirá percibiendo 745 habitantes por dicha vía, 17 más que el pasado 2008.

En este sentido, el número de residentes censados en otras provincias que vengan a vivir a Navarra seguirá superando al total de navarros que emigren hacia otras comunidades autónomas.

Del total de 9.341 inmigrantes procedentes del resto del Estado en 2008, se pasará a 7.526 en 2012, a 7.150 en 2015 y a 7.099 en el año 2017 (un total de 2.242 personas menos que en la actualidad).

Por su parte, la cifra de navarros que vayan a vivir a otras regiones del Estado también se reducirá acusadamente en este periodo. Si durante 2008 emigraron un total de 8.613, en 2018 esta cifra bajará hasta los 6.354. Un descenso cuesta abajo que no muestra síntomas de recuperación en ninguno de los diez años analizados.

evolución por edades En lo que se refiere a la evolución de la estructura por edades, y centrándonos en los datos que ofrece el estudio respecto al conjunto del Estado, la población entre 16 y 64 años crecerá un 4,7% desde 2008. Por su parte, los menores de 15 años aumentarán un 13,1%. Este incremento se producirá por la acción combinada de fecundidades crecientes y mayores efectivos en los grupos de edades de mujeres potencialmente fecundas.

Se estima que el mayor incremento se producirá en el grupo de edad de mayores de 64 años, que crecerá un 19,2% en la próxima década. Ante esta evolución de la estructura por edades, la tasa de dependencia (relación entre la población menor de 16 año o mayor de 64 y la población de 16 a 64 años) continuará su tendencia ascendente y pasará del 47% al entorno del 53%.