BARCELONA – Si un disparo criminal no hubiera acabado con su vida en 1968, el martes cumpliría 80 años Martin Luther King jr. En recuerdo de su pacifista legado, un ejemplo de querer acabar con la persecución racista, el Ayuntamiento de Sitges ha organizado una exposición en la que participan 70 artistas y 40 escritores y pensadores de los cinco continentes. Todos ellos aportan su visión y reflexión sobre quien fuera Premio Nobel de la Paz en 1964.
La muestra se titula «I have a dream» (Tengo un sueño), título tomado del famoso discurso de King en el que se abogaba por acabar con las diferencias provocadas exclusivamente por el color de la piel.
La exposición se inaugurará en Nueva York el 21 de enero, con la presencia del vicepresidente de la Generalitat Josep Lluís Carod – Rovira, el día después de la toma de posesión del nuevo presidente norteamericano Barack Obama, y se podrá visitar en la sede de la Fundación Cristóbal Gabarrón hasta el 8 de marzo. Posteriormente la muestra irá a Tennessee, Atlanta, Montgomery, finalizando su itinerario por Estados Unidos en Chicago. El año que viene llegará a Sitges, iniciando un itinerario por diferentes ciudades europeas.
El comisario de esta iniciativa, Gabi Serrano, ha reunido a autores de todo tipo: desde el retrato figurativo a la representación abstracta pasando por la instalación o la fotografía. Ha conseguido reunir a nombres tan dispares desde el punto de vista artístico como Andreu Alfaro, Ed Clark, Xavier Corberó, Luis Gordillo, Josep Grau – Garriga, Richard Hamilton, Perico Pastor, Carlos Pazos, Josep Uclés o Cui Xiumen, entre otros. Cada uno de ellos conserva su estilo personal, pero al servicio del sueño del reverendo King.
Gran fuerza
Por ejemplo, Enric Ansesa, en «Dream (Homenatge a MLK)» realiza una composición de gran fuerza en la que, según sus palabras, «cada punto, cada uno de nosotros debe ser la confirmación y la defensa de la realidad de aquel sueño que tantos sacrificios costó. La diferencia es la confirmación de la unidad solidaria». Por su parte Lluís Cera realiza una escultura que, bajo el título «Yes, we can», recrea un simbólico abrazo que se convierte en un gesto en el que «interactuan dos cuerpos, dos almas que, por encima de las diferencias, se funden un mismo sentimiento».
La iniciativa también cuenta con un catálogo en el que se recogen, junto a las obras, textos de diferentes autores, como Alfonso Guerra, Valentín Fuster, Joan Margarit o Carme Riera.