A través de la música y el teatro han reunido a miembros de grupos hasta ahora rivales en un proyecto común

«Este proyecto comenzó con dichos, ahora son hechos». Manny, uno de los 30 participantes en la iniciativa Unidos por el Flow rapea con orgullo la primera estrofa de la canción insignia de un cedé que acaba de salir al mercado. Un grupo de jóvenes latinos en riesgo de exclusión social, entre los que se encontraban miembros de los rivales latin kings y ñetas, conducidos por educadores y músicos profesionales, se pusieron la meta de producir un disco, sacar un libro y un documental de la experiencia y realizar una obra teatro. El arte y la música al servicio de la transformación social. En Barcelona, y bajo la batuta de educadores y artistas gallegos.

«La cosa comenzó como un experimento local, pero ha tenido una repercusión global», explica el coordinador e ideólogo del proyecto, el lalinense Xaime López, más conocido como Chispón y «culpable» de que un nutrido grupo de artistas gallegos se involucrasen en la iniciativa. Durante casi tres años, a través de talleres de canto, de pinchadiscos, de producción musical y de teatro se marcaron como finalidad mejorar las relaciones de latins, ñetas y otros jóvenes barceloneses.

No habría sido posible sin un intenso trabajo comunitario coordinado desde el centro de jóvenes de Roquetas, donde germinó la idea a raíz del primer concierto celebrado entre ñetas y latins en el 2005. Así, el distrito barcelonés de Nou Barris (y en concreto el barrio obrero de Roquetas) vio crecer una idea en la que por primera vez miembros de dos organizaciones latinas rivales se unían para mostrar otra realidad.

El camino no fue fácil y a pesar de una escasa financiación, los organizadores pusieron toda su pasión, gracias a la cual los participantes aprendieron mucho más que música. «Con la música nos conocimos a fondo. Aprendimos a convivir, no importaba que fueses latin, ñeta, gitano… Al entrar en este proyecto te quitabas las etiquetas y descubrimos que todos somos iguales», reconoce Benny El Bullterier, ñeta y uno de los cantantes. Lordy, ecuatoriano de 17 años, que canta y es integrante del grupo de teatro Mas que Tres, también apunta que la disciplina fue otra de las lecciones aprendidas: «Estábamos muy acostumbrados a vivir en la calle y no tener horarios. Aquí tenías que cumplir, sino el proyecto no salía adelante».

El resultado tangible de Unidos por el Flow (www.unidosporelflow.org) es un cedé compuesto por 16 canciones en el que se mezcla el hip – hop con ritmos latinos, flamencos y suenan instrumentos y voces en gallego. Sus letras hablan de pobreza, de racismo, del maltrato a la mujer. En definitiva, de las preocupaciones de un grupo de jóvenes que quieren cambiar la situación que les ha tocado vivir.