Un inmigrante de origen subsahariano murió por disparos de la policía marroquí y otros 14 fueron detenidos ayer por la mañana cuando un grupo de 80 personas intentaba pasar a la ciudad autónoma de Melilla asaltando un paso fronterizo. Los inmigrantes forzaron la entrada del paso de Farjana, lo que llevó a los agentes a realizar varios disparos de advertencia, según informaron fuentes oficiales citadas por la agencia de noticias africana APA.

Uno de esos disparos hirió a un inmigrante que falleció cuando era trasladado a un hospital. Los agentes arrestaron a 14 inmigrantes, mientras que el resto del grupo logró escapar. El grupo trató de forzar un paso a la altura de la localidad marroquí de Iyassenen.

Las vallas y puntos de paso a los enclaves españoles de Melilla y Ceuta han sido asaltados en varias ocasiones en los últimos años por grupos de inmigrantes, fundamentalmente subsaharianos. En 2008, las autoridades marroquíes frustraron más de 10.235 intentos de cruzar la frontera de forma ilegal y desmantelaron casi 200 redes de tráfico de personas.

En 2007, abortaron más de 10.000 intentos por parte de inmigrantes ilegales de dirigirse a las costas españolas y desmantelaron unas 260 redes de tráfico de personas. Ayer mismo, una patera con cinco inmigrantes a bordo fue interceptada de madrugada en las proximidades de la costa de Melilla, aunque finalmente la embarcación no arribó a territorio español, sino que lo hizo en suelo marroquí.

Según explicaron fuentes policiales, la embarcación partió de las inmediaciones de la zona de Aguadú en torno a la medianoche, aprovechando las campanadas del nuevo año. Sin embargo, la barca llegó a territorio marroquí.

Las cámaras de vigilancia del vallado fronterizo detectaron de madrugada la aproximación de un grupo formado por unos 80 inmigrantes subsaharianos. El intento de acercamiento al perímetro melillense, que se vio frustrado por la intervención marroquí, se produjo por la zona cercana al aeropuerto.

Los inmigrantes se quedaron a “mucha distancia” del vallado de Melilla , por lo que no hubo intervención de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas.

El último intento de entrada de inmigrantes ilegales consumado en la frontera de Melilla se produjo el pasado 1 de diciembre, cuando una veintena de extranjeros trataron de entrar en España aprovechando que la valla que protege el cauce del río estaba rota por efecto de las lluvias torrenciales, objetivo que sólo consiguieron seis de ellos.