bilbao. Cocinan de manera voluntaria los 365 días del año para que las personas sin recursos coman a diario y, llegada la Navidad, se esmeran aún más por hacer que el día a día de sus habituales comensales tome, aunque sea por un rato, las tonalidades de estas fechas. Pero las cosas cambian y los comensales de los comedores sociales también. Por ello desde hace unos años en su menú navideño los cocineros varían los menús según el lugar de procedencia de los más necesitados. Un alto porcentaje son personas de origen árabe por lo que el cerdo ha desaparecido de los platos y el jamón se sustituye por queso.

“Planteamos hacer comidas especiales aunque cada vez menos. El 70% de la gente que viene es árabe y, además de tener cuidado con el cerdo, para ellos no son días especiales, no los celebran. Incluso el año pasado tuvimos algún problema porque se pensaban que las barbas de los langostinos de la sopa de pescado eran pelos”, explicaron desde el comedor de los Franciscanos de Irala. Pero no sólo las comidas han cambiado “ellos mismos al no ser fiesta en su cultura comen y se van rápido. A la media hora de la cena ya sólo quedamos los voluntarios, cuando hace veinte años las sobremesas se alargaban hasta cuatro horas. Cantaban villancicos y charlaban hasta la madrugada”, aseguró uno de los voluntarios.

Lo que sí se mantiene es la tristeza de estos días para los más necesitados. “Para los que son de aquí hoy es un día muy triste. Recuerdan las Navidades de su infancia o cuando vivían con sus hijos”, comentan los Franciscanos, “nosotros intentamos ponérselo más fácil y atrasamos la hora de la cena una hora para que no se encuentren con las familias que van a cenar ni vean cómo la gente derrocha cuando ellos no pueden”.

Consomé, dulces navideños o cordero coinciden en los menús de varios comedores de Bilbao. El de las Apostólicas ofrece cenas sólo para los que viven en su parte residencial, pero elabora comidas para todo el que disponga de la requerida tarjeta que otorga el Ayuntamiento para acceder al comedor: “No pueden hacer sobremesas porque vienen alrededor de 150 personas diarias y se tienen que ceder el sitio unos a otros”, explicó Kepa Eguzkiza desde el comedor, en sus declaraciones a DEIA. “Pero para esta gente son días complicados de mucha ternura y echan de menos a la familia. El día de Nochevieja es diferente porque se lo toman como una fiesta”, añadió.

La variedad de problemas hace que muchos decidan no acudir a los comedores en Nochebuena: “Hay gente que se queda en la pensión donde vive con el patrón o incluso en el caso de los inmigrantes deciden reunirse en una casa para celebrarlo todos juntos, o se quedan simplemente en su casa porque les da pena salir”, comentan desde el comedor de Conde Aresti.

Comida especial, e incluso refrescos o café se añaden hoy al menú de los comensales más desfavorecidos. Unos doce euros por persona es el valor de su menú. Ellos no lo pagan, porque no pueden y, en algunos casos, tampoco lo comparten porque no tienen con quién.

la cena más entrañable del año

Recolectas por Navidad

Los sentimientos afloran por estas fechas por ello Cáritas hace hincapié como cada año en los valores de compartir, de solidaridad y acogida con su tradicional campaña navideña. Hay personas que no acuden a los comedores sociales pero sí necesitan ayuda para poder comer en sus hogares. Por ello Cáritas llevó a cabo el pasado domingo una campaña de sensibilización social y captación de recursos, dentro de su Plan de Actuación frente a la crisis. Alrededor de 300 parroquias se sumaron a la iniciativa “aunque hasta febrero no sabremos los resultados”, comentaron desde Cáritas. De lo que sí se han percatado es de que, dentro del balance de 2008, los donativos han descendido un 20% y las peticiones de ayuda económica han aumentado un 40%. Y es que la crisis ha traído unos nuevos perfiles a los solicitantes de ayuda: inmigrantes que, una vez asentados pierden su empleo; familias autóctonas que pierden el empleo; inmigrantes que llegan de otras localidades del Estado y personas con situación de partida débil. >c.c.

menú comedores

· Franciscanos. Entremeses (langostinos, aceitunas, espárragos…). De primer plato consomé, de segundo cordero y de postre dulces navideños (turrón, polvorones…).

· Apostólicas. Este comedor sólo da cenas a los residentes del albergue pero los días 25, 1 y 6 ofrece al público un menú especial cada día. Mañana cocinarán langostinos, jamón (queso para los musulmanes), espárragos, ensaladilla, cordero y dulces navideños. El día de Año nuevo habrá paella de marisco, bacalao con piperrada y dulces navideños y el día de Reyes entremeses variados, consomé o sopa y pimientos rellenos de bacalao.

· Elejabarri. La cena de hoy será diferente: los comensales disfrutarán de langostinos y espárragos, consomé, chuleta de ternera con guarnición, helado, turrón y polvorones, café y refrescos.

valor

12

· Por comensal. El valor del menú por persona que ofrecen los comedores ronda los doce euros.