Un café de Bilbao y el barrio madrileño de Lavapiés se los llevan enteros
Inmigrantes, jubilados y algún desempleado celebraban ayer su suerte en la administración número 136 de Madrid
La Verdad,
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23-12-2008
Un clásico café del centro de Bilbao y una administración ubicada en pleno corazón del barrio de Lavapiés de Madrid. Son las dos caras de los cuartos premios, que se han vendido sólo en dos administraciones, la 136 de Madrid y la 59 de Bilbao, que han repartido íntegros los dos cuartos premios del sorteo extraordinario de Lotería de Navidad, que han correspondido a los números 49730 y 79294, y han repartido los 200.000 euros con que está dotada cada serie.
La cafetería restaurante Moyúa, situada en la Gran Vía bilbaína, ha repartido entre sus clientes uno de los cuartos premios del sorteo, que ha recaído en el número 79294 y que se ha vendido íntegramente en este céntrico establecimiento. Según explicó uno de los encargados de este establecimiento, José Ángel Gómez, el premio, que se ha vendido en décimos y en participaciones de 10 euros, estará muy repartido entre la clientela y los empleados, quienes se embolsarán 20.000 euros por cada décimo premiado. Txetxu, uno de los camareros, ha apuntado que entre toda la plantilla han jugado dos series y ha confesado que utilizará su parte para «tapar agujerillos».
En Madrid, los responsables de la administración número 136, en el popular barrio de Lavapiés han repartido el otro cuarto premio del sorteo, y lo han hecho en ventanilla entre los vecinos, que lo han comprado «poco a poco». Una de los momentos más emocionantes de la mañana llegó cuando una vecina que paseaba junto a su marido, vio el jaleo de gente y decidió pasar a «ver qué pasaba», momento en el que se enteró de que ella misma llevaba un décimo premiado que iba a destinar a «ayudar» a su hija «a pagar la hipoteca». Mugieran, una dominicana que lleva viviendo en España «un año y medio», apuntó que había comprado ese número porque su madre «soñó» con su «abuela que le decía que acababa en treinta, que este era el que iba a tocar».
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