El Parlamento Europeo (PE) aprobó hoy definitivamente el presupuesto comunitario para 2009, que reforzará los recursos de la agencia de fronteras Frontex y que incluye el pago de más de la mitad de los 1.000 millones de euros de ayuda agrícola que la UE ha decidido dar a los países más pobres.
 

Las cuentas europeas para el próximo año ascienden a 116.096 millones de euros en créditos de pago – aquellos que se ejecutarán efectivamente en el próximo ejercicio – y suponen casi un 0,9% de la Renta Nacional Bruta (RNB) de la Unión.
Mientras, los créditos de compromiso ascienden a 133.777 millones (un 1,03% de la RNB de la UE).
En 2008, los créditos de pago fueron 120.346 millones y los de compromiso 129.149 millones de euros.
El presupuesto de este año destina 10 millones de euros suplementarios a la agencia Frontex, que en 2008 dispuso de un presupuesto de 70 millones de euros.
El refuerzo de Frontex ha sido una de las prioridades de los eurodiputados, que hoy mismo solicitaron a los gobiernos en otro informe más recursos para que la agencia pueda desarrollar misiones permanentes y con más medios.
Otra de las novedades es la financiación del fondo de 1.000 millones de euros creado por la UE para ayudar a los países en desarrollo a hacer frente a la subida del precio de los alimentos.
Finalmente y tras la presión de los eurodiputados, la mayor parte del dinero provendrá de fondos adicionales añadidos al presupuesto y no de partidas no gastadas de la política agrícola común.
Para 2009, la UE ha creado una línea especial en sus cuentas a través de la que se financiarán 568 millones de euros de esta iniciativa, que se completarán con los 262 que se dieron este año y con los 170 previstos para 2010.
Además de satisfacer las necesidades alimentarias básicas de la población, la ayuda europea se destinará a impulsar la agricultura en los países menos desarrollados, facilitando el acceso a semillas y fertilizantes y ofreciendo financiación para mejorar equipamiento e infraestructuras.
La ponente del presupuesto en el PE, la socialista alemana Jutta Haug, destacó hoy la importancia de las cuentas de 2009 de cara a las políticas de lucha contra el cambio climático y para “mantener la dimensión social en el contexto del crecimiento para lograr empleo”.
Además, la Eurocámara expresó hoy su disposición a negociar la revisión de las perspectivas financieras 2007 con los Estados miembros para incluir las medidas contra la crisis económica propuestas por la Comisión Europea.